Make a Wish

Capítulo 29: Nos vamos a la India.

Harry pasó la mañana repasando los diversos textos mágicos que se habían recuperado de sus hallazgos. La mayoría de ellos no eran nada espectaculares, pero uno le llamó la atención. Era un diario de una de las tumbas que databa de la época tardorromana. Las primeras páginas de la revista lo etiquetaron como una copia de un documento anterior.

"Un poco bastardo quejumbroso," Harry echó un vistazo a las primeras páginas. "Lleno de sí mismo también."

Aproximadamente a la mitad del libro, se encontró con algo que le llamó la atención. Dejando el libro, Harry se dirigió al puente para encontrarse con Henchgirl y el profesor.

"Hola profesor," Harry entró en la habitación y miró a su alrededor. "¿Quienes son todas esas personas?"

"Por supuesto que conoce al Director Asim", sonrió el profesor. "Este es el señor Jones, es un representante del banco Gringotts".

"Encantado de conocerte", asintió Harry al hombre. "¿Hay alguna razón por la que eligió visitarnos?"

"Esperábamos que estuvieras dispuesto a subcontratar la recuperación del tesoro", sonrió Jones. "Eso te permitiría seguir adelante y recuperar el tesoro mucho más rápido".

"Oh," asintió Harry. "¿Cuánto quieres?"

"Estábamos pensando que la mitad de su acción sería un precio justo", sugirió Jones.

"Oh," asintió Harry. "No."

"¿Qué?" Jones nunca había estado en una negociación como esta.

"No," sonrió Harry. "Pero gracias por la oferta."

"¿Por qué viniste aquí?" Henchgirl preguntó con una sonrisa.

"Oh," asintió Harry. "Casi lo olvido, solo quería decirte que quería hacer una parada rápida en Atlantis cuando llegáramos a cruzar el océano Atlántico".

"¿Qué?" Gritó casi todas las personas en la habitación.

"Solo que quería hacer una parada rápida en Atlantis", respondió Harry. "Hay algo que me gustaría recoger".

"¿Sabes dónde está Atlantis?" Jones preguntó con incredulidad: "¿La gente ha estado buscando el lugar de descanso de la ciudad perdida durante años?"

"Sí," asintió Harry. "No lo habrían encontrado, está bajo un hechizo que te impide encontrarlo a menos que conozcas la ubicación y el hundimiento no dañó los encantamientos".

"¿Mencionaste que querías recoger algo?" Asim preguntó, queriendo volver a encarrilar la conversación.

"Sí", asintió Harry. "Un tipo llamado Myrddin escondió un libro que dijo que contenía un gran poder justo antes de que lo echaran y me gustaría ver qué hay en él".

"¿Myrddin?" Asim preguntó en estado de shock, "¿echado?"

"Sí", asintió Harry. "Dijo que lo echaron porque estaban celosos de su gran poder, y la razón oficial fue porque era demasiado débil mágicamente, pero creo que fue porque era un bastardo llorón y simplemente se cansaron de él".

"¿Qué más puedes decirnos sobre Myrddin?" Jones demandó.

"Bueno," Harry hizo una pausa para pensar por un momento. "Tenía mucho acné, cabello rojo y su voz no cambió hasta los quince años". Harry negó con la cabeza, Dios era tedioso ese diario. "Sin embargo, no puedo decirte nada sobre cómo era después de su decimoséptimo cumpleaños."

"Oh," los hombres compartieron una mirada.

"Bueno," bostezó Harry. "Voy a ir a tomar una siesta".