Devoción

Capítulo 10

Advertencia: Este capítulo tiene contenido adulto. Lean bajo su propio riesgo.

Hay un rumor en el Pico Qing Jing.

De dos hombres con el apellido Shen. Uno tenía un aire de elegancia, sostenía un abanico en sus manos que cambiaba de diseño cada día, vestía inmaculadamente con túnicas verdes y blancas, el pelo recogido con una corona de jade, el resto cayendo en cascada por su espalda. El otro iba vestido con la ropa general de los discípulos del Pico Qing Jing. Si no fuera por su corona de jade a juego metida dentro de su moño, sujetando la trenza a su alrededor, nadie sabría que el dúo eran los dos hombres Shen.

El rumor dice que los dos llegaron a la cima con una recomendación de Yue Qingyuan. Que los dos hombres estaban enamorados y nunca se alejaron demasiado del otro. Se pegaron como el pegamento.

Y entonces, Shen Qingqiu se convirtió en discípulo principal con facilidad, su ingenio y personalidad llamaron la atención del Señor del pico. Shen Qingqiu estaba en la cima de todos sus estudios, era el perfecto discípulo modelo del Pico Qing Jing.

Shen Yuan, por otro lado, parecía tan suave como una almohada de plumas, hablaba con amabilidad y cuidado, sin embargo, en el momento en que alguien se atrevía a hablar mal de Shen Qingqiu, era como si se activara un interruptor. Shen Yuan se volvía despiadado, socavando al que se atreviera a hablar por encima de Shen Qingqiu.

Para cierto discípulo llamado Ai Ruisu, que había llegado antes que el dúo, descubrió que realmente odiaba a Shen Qingqiu y que a menudo se había llevado la peor parte de la ira de Shen Yuan, es solo que se enfrentaba a menudo con Shen Qingqiu. Ahora, no es que tratara de cabrear constantemente a Shen Yuan, es que chocaba a menudo con Shen Qingqiu. Se había esforzado por ser el discípulo principal, había hecho todo lo posible por caer en gracia a su Shizun, y de alguna manera, un mocoso simplemente llegó pavoneándose[1] y... Ai Ruisu no quería otra cosa que quejarse a sus compañeros, pero al final, todos sabían que no se podía decir nada. Era como si Shen Yuan tuviera oídos en todas partes, él sabría cuando se dijera algo malo.

Era sólo el comienzo de los rumores. Había más, y Ai Ruisu descubrió que aunque las cosas fueran completamente ciertas, ¿le importaba a su Shizun? ¡No! Todavía miraba a su discípulo principal con orgullo y Shen Yuan era apreciado por su naturaleza amable.

¡Amable mi trasero!

Ai Ruisu había estado en el otro lado de esa naturaleza 'amable'. Shen Yuan era una amenaza detrás de esa sonrisa, y el único con la verdadera naturaleza amable era Yue Qingyuan, y Ai Ruisu no tenía idea de cómo los dos Shen eran siquiera amigos de un hombre tan santo.

Para empeorar las cosas, Shen Yuan y Shen Qingqiu... se mostraban asquerosamente cariñosos a pesar de las normas del Pico Qing Jing.

¡Actuar con nobleza, ser puros...!

¡Sin embargo, esos dos!

La mayoría de las veces, Ai Ruisu se tropezaba con ellos tocándose más íntimamente de lo que los amigos deberían hacer. Las piernas se entrelazaban mientras estudiaban de cerca, la cabeza inclinada hacia abajo. Se cogían de la mano, Shen Yuan siempre besaba la mejilla y la cabeza de Shen Qingqiu como si fuera un mocoso mimado. ¡Abrazándolo como un amante incluso en público!

¿Y su Shizun hizo algo? Ni siquiera los castigos,  vueltas extra alrededor del pico, cortar leña... nada de eso evitaría que Shen Qingqiu se dejara consentir por Shen Yuan.

Ahora, Ai Ruisu no odiaba a los mangas cortadas. Simplemente odiaba a Shen Qingqiu.

Pero ahora, está acostado en la cama y escuchando... a Shen Qingqiu... pedirle a Shen Yuan que se case con él.