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El día terminó más rápido de lo que me hubiera gustado, mañana era domingo y dios no saben la pereza que me da tener que pensar en que el lunes hay escuela de nuevo. Al final Hyunjin aceptó regresar a casa con Yeji y quedarse ahí, aunque la relación con su madre me preocupara de cierto modo prefería no intervenir hasta que el se sintiera seguro de decirme.

Era cerca de la media noche y mis padres aún no regresaban de la oficina, aunque fuera algo que pasara normalmente, no podía evitar preocuparme por como estaban. Ahora que lo recuerdo hace mucho no tengo un ataque, los tics pues siguen siendo constantes, pero, se han reducido bastante. Tal vez mi pulgoso interno se sienta a gusto con algo o alguien. Cuando me diagnosticaron tourettes dijeron algo sobre mi predestinado, cabía la mínima posibilidad de que mejoren si encontraba a mi destinado y este me marcaba; realmente nunca me había interesado en encontrar un alfa, la mayoría eran idiotas y seguían creyendo en la superioridad de estos, cuando esa monarquía había sido dejada atrás hace ya varios años.

En fin, pensar en que alguien me marque, me asusta; el que te marquen significa estar enlazados, cuerpo y alma se conectan hasta el punto en que sus latidos forman una misma melodía. Sonaba muy bonito, como un cuento de hadas; pero, si alguno de los dos llega a romper el lazo todo se transforma en dolor y sufrimiento, muchos alfas han salido vivos de un lazo roto, pues tan solo encuentran un omega al cual marcar y problema resuelto. Para los omegas siempre será más difícil, un lazo roto es significado de un omega impuro e imperfecto, ¿Quién querría un omega así? aunque suene horrible es nuestra realidad, por esto los omegas marcados y luego abandonados mueren en poco tiempo.

El tiempo pasaba y yo seguía metido en mis pensamientos, el ruido de mi celular me regresó a la realidad, era un número no registrado en mis contactos, respondí aún dudando, pero podría ser algo importante.

- Si?

- Joven Yang, sus padres- accidente- escuchaba una ambulancia, su voz preocupada y mucho ruido.

- Qué pasó? hable claro por favor

- Tuvieron un accidente, están siendo trasladados a la clínica central, el chofer esta yendo por usted y la señorita Yuna. Por favor traiga sus medicamentos y vengan con cuidado.

Corte rápido y salí corriendo de mi habitación a la de Yuna, sentía como mis ojos se cristalizaban, pero no podía llorar, no ahora, lo que menos quería era asustarla.

- Yuna, cámbiate rápido, agarra lo necesario debemos irnos

- ¿Qué sucede? Yang Jeongin! responde!

- Son papá y mamá, por favor date prisa

Sin escuchar más se levantó rápido, hacía un frío de los mil infiernos y realmente no sabía si temblaba de miedo o de una posible hipotermia. El chofer nos estaba esperando fuera de casa. Cerramos la casa con llave y subimos lo más rápido posible al auto.

En poco tiempo estábamos ahí, ambos alterados y sudando frío de la preocupación. Nos llevaron rápidamente a las salas del hospital; mamá tenía sangre en la cara, ojos cerrados y llevaba una máscara que le ayudaba a respirar. Papá, dios, papá lucía mucho peor que mamá, tenía la cabeza vendada, muchos cables conectados a su cuerpo y el jodido respirador. Podía sentir la ansiedad carcomiéndome, debía calmarme, mas no podía, la imagen de mis padres ensangrentados a más no poder no se iba de mi cabeza, necesitaba a Hyunjin, era lo único que necesitaba ahora.

Salí de ahí para dirigirme a los baños y poder llamarlo, no quería molestarlo, pero, demonios si no lo tenía a mi lado ahora iba a tener un infarto. Respondió al segundo timbre, gracias al cielo.

- Hola, cielo. ¿Sucede algo?

- Jin- Jinnie- soltaba hipidos que no me dejaban hablar- mis- mis padres e-están en el hos-hospital. Te necesito Jin- sollocé más fuerte de lo que me hubiera gustado, pero ya no lo podía soportar, tenía miedo, estaba completamente aterrado. ¿Qué si mis padres no despiertan? ¿Qué sucederá con nuestra familia? ¿Cómo demonios lo iba a soportar? ¿Qué sucedería con Yuna?

- Innie, cariño. Escúchame, necesito que regules tu respiración y me digas en que clínica están, ya salí de casa y prometo no demorar más de diez minutos si?

- E-estamos en la central, ten mucho cuidado por favor. No soportaría verte así a ti.

- Está bien, cariño. estaré ahí en poco tiempo, te amo, realmente lo hago.- Sin dejar que le responda cortó la llamada, me miré en el espejo y estaba hecho una mierda, pero eso no importaba ahora.

Fui a la sala de espera y vi a mi hermana dormida en el sillón del pequeño cuarto.

- Se alteró y las enfermeras la durmieron- el señor Wong, amigo de mi padre, casi de la familia; estaba a mi lado.

- ¿Sabes que sucedió?

- El chofer del auto estaba borracho, pasó la luz roja y una camioneta impactó al auto; al parecer tu padre protegió a tu madre.

- Lo supuse, ¿Estarán bien?

- Tu madre no tiene heridas graves y despertará en cualquier momento.

- ¿Qué hay de papá?

- Recibió el mayor impacto, tiene heridas leves a excepción de una en la cabeza. Aún no nos han dado más información- dijo mostrando un semblante triste

- Debería ir a casa, nuestros abuelos llegarán en cualquier momento

- Claro que no, me iré a casa cuando me asegure que habrá alguien cuidándolos y que hayan noticias de Daniel.

Escuché pasos acelerados y al voltear vi a Hyunjin buscando a alguien como loco, hicimos contacto visual y corrió hasta a mi para abrazarme.

- Innie, ¿Cómo estás? ¿Qué sucedió?

- Con permiso, iré a preguntar por tu padre- ambos hicimos una reverencia y el señor Wong se marchó

- Mis padres tuvieron un accidente automovilístico- dije sintiendo como se me volvían a cristalizar los ojos

- ¿Les han dicho algo?

- Mamá está fuera de riesgo, pero papá, no hay noticias de el- me volvió a abrazar, tal vez más fuerte que antes y me permiti llorar como un niño pequeño al perder su juguete favorito.

- Tranquilo, es un alfa fuerte, verás que va a estar bien, pequeño- besó mi frente y volvió a abrazarme.

Predestinados  «Hyunin»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora