𝗡𝗘𝗢𝗡 𝗠𝗢𝗢𝗡 │ DOTAE

NEON MOON 4/9

A pesar de que la gira de 127 terminó y los miembros finalmente tienen un breve descanso, no es el caso de TaeYong y Mark, ya que comienzan las prácticas para sus propios horarios con SuperM. La agenda de TaeYong está ridículamente llena y DoYoung escucha dolorosamente cuando TaeYong le cuenta todo al respecto. Demasiado trabajo por hacer, mucha gente con quien hablar y reunirse, tantos viajes en avión, horas interminables o prácticas de baile, muy poco tiempo para tomar un descanso. (Mucho tiempo para sentir que quiere salir de su propia piel. Mucho tiempo para sentirse atrapado).

TaeYong ha desarrollado mecanismos de afrontamiento, aprendió DoYoung. Le gusta pintar y dibujar, más de lo que les dice a los muchachos. Juega videojuegos, escucha música y explora ritmos para escribir sus propias canciones. Son saludables y útiles, dice TaeYong, pero son difíciles de recordar cuando él se siente así. Cuando su propio yo se vuelve demasiado pesado y grande para cargar, cuando su mente se vuelve tapada, amortiguada y borrosa, cuando necesita ser un poco menos en algunos aspectos y un poco más en otros. Menos pesado, más libre. Menos guiando, más guiado. Ligero, suave, abajo.

Cuando llegan esos momentos, TaeYong se olvida de esas cosas útiles y saludables, y en su lugar se concentra en ir al gimnasio y levantar pesas que debería evitar cuando se siente tan cansado y no ha comido nada de mucha sustancia. Se enfoca en cerrar la puerta de su habitación y jugar videojuegos ruidosos que ahogan sus pensamientos, hacen que sus ojos se pongan rojos y sus oídos zumban. Duerme cuando es difícil distinguir si es tarde en la noche o temprano en la mañana.

Es así durante casi una semana. Seis días de dormir durante 4 horas como máximo, comer algo rápido y volver al trabajo tan pronto como haya tragado el último bocado. Seis días sintiéndose enteramente demasiado y sabiendo que no está haciendo lo suficiente, lo que hace que TaeYong trabaje el doble de duro y se enfrente a las consecuencias mientras se ducha todas las noches y siente otro calambre o dolor muscular. No ha ido a DoYoung en seis días. Despertarse antes que todos los demás, regresar cuando todos ya están en sus propias habitaciones, no ir a la cocina o al área común si no es extremadamente necesario... Evitando a DoYoung, si quiere ponerse técnico. Lo cual TaeYong no hace- porque no está evitando a DoYoung. Simplemente está en lugares donde el otro no está.

Sin embargo, TaeYong debería haber sabido que sus acciones no estaban encaminadas a lo que había acordado con DoYoung. Además de todo, se sentía culpable por romper su promesa y no dejar que el más joven supiera cómo se sentía exactamente. Tan pronto como lo piensa, se siente abrumado por la frustración. ¿Por qué no puede cuidarse solo? Tiene 25 años, joder. ¿Realmente necesita la ayuda de alguien más con eso? ¿Es realmente necesario involucrar a su mejor amigo en este lío de la vida que enfrenta TaeYong? No, mierda. TaeYong escucha esos pensamientos en su mente repetidos cada vez que considera hablar con DoYoung, castigándose a sí mismo por siquiera pensar en ello.

Es todo lo que pasa y esos pensamientos los que lo hacen llorar mientras se prepara una taza de té. Está infinitamente contento de estar solo, por lo que no tiene que enfrentarse a la vergüenza de llorar, a los ojos de nadie, por verter agua caliente en una taza de porcelana.

Está bien, se dice TaeYong, todo estará bien. Se va a su habitación.

Cuando toma un sorbo, siente como si el mundo entero se derrumbara; se olvidó del azúcar. Esta vez, permite que las lágrimas corran desenfrenadas.