¿Pregnant Of My Best Friend? [JoongHwa / SeongJoong] [ADAPTACIÓN]

Capítulo XXIV

—Hongjookkie —Habló en todo elevado mientras tomaba en brazos a JaeHwan, el cual se entretuvo con una fina cadena que había en el cuello de Seonghwa —, apresurate, se nos hará tarde

—Uy, sólo llevamos un minuto de retraso —Rodó los ojos con gracia al ver el ceño fruncido de su novio. Depositó un pequeño beso sobre la punta de la nariz ajena—. No te enojes, cariño.

—Es imposible enojarse contigo —Formó un pequeño puchero, el cual fue besado por el mayor.

La pequeña familia finalmente pudo salir de casa para dirigirse hacía el auto. Seonghwa dejó a su hijo en la parte de atrás con un asiento especial para bebés, luego de dejarlo bien asegurado, se sentó en el asiento de copiloto y Hongjoong en el asiento de conductor.

Cuando el auto comenzó a andar, el castaño encendió la radio para que el ambiente fuera más amigable de lo que ya estaba.

—¡Papá! —El pequeño JaeHwan comenzó a mover sus piecitos de adelante hacía atrás.

—¿Si, bebé? —Hongjoong dirigió sus ojos hacía el retrovisor para ver a su hijo y luego nuevamente hacía el camino.

—Te amo —Sonrió ampliamente dejando a la vista sus pequeños dientes.

El pelinegro sonrió de igual forma, dejando escapar inconscientemente una pequeña risa. —También te amo, bebé.

Seonghwa frunció un poco los labios al sentirse un poco celoso, por lo que volteó su cabeza para ver a su hijo, el cual miraba sus manos como si fueran la cosa más interesante del mundo.

—¿Y yo, amor? —Formó un pequeño puchero, aún sin tener la atención de JaeHwan—. ¿Amas a papi?

JaeHwan hizo una pequeña “o” en sus labios para luego mostrarle sus manos a Seonghwa, este último ladeó su cabeza confundido.

—¡Papi! Tengo diez deditos —Sonrió ampliamente el pequeño castaño a la vez que movía sus dedos eufórico.

Hongjoong mordió su labio inferior para retener su carcajada mientras que Seonghwa volvió correctamente a su puesto; aún con un puchero adornando su rostro.

—Cariño, si te hace sentir mejor, yo te amo mucho —Posó una de sus manos sobre las más pequeñas. Seonghwa finalmente sonrió.

—También te amo mucho.

Después de unos cuantos minutos de viaje, la pequeña familia había llegado a su destino.

Cuando el pelinegro tocó el timbre, se apareció el moreno con sus cabellos desordenados, bolsas muy moradas y notables bajo sus ojos, y con una bolsa de pañales en mano.

—¡Hey! Yunho, ¿qué tal todo? —Comentó con cierta burla el segundo mayor de los presentes.

Yunho frunció el ceño. —Duerme, come y hace popo a cada segundo —En su voz se le notaba cuán cansado estaba—, pero eso no quita el hecho de que adoro ser padre.