¿Pregnant Of My Best Friend? [JoongHwa / SeongJoong] [ADAPTACIÓN]

Capítulo XXV

El pelinegro se detuvo frente a la puerta de su casa por unos segundos, en donde se dedicó a inhalar y exhalar reiteradas veces por los nervios. Ya un poco calmado, introdujo la llave en la cerradura y se adentro a su hogar con una amplia sonrisa.

—Ya llegó por quien lloraban —Utilizando un tono elevado para que sus chicos lo escucharán, dejó su maletín a un costado para poder quitarse su abrigo.

El pequeño JaeHwan asomó su cabeza desde el living con una pequeña sonrisa adornando su rostro, y cuando conectó miradas con su padre, este salió de su “escondite”.

—¡Papá! —Corrió hacía el mayor con sus brazos extendidos para poder abrazarlo, lo cual fue correspondido inmediatamente.

—¿Cómo estás, bebé? ¿te has portado bien? —Alzó el pequeño cuerpo de su hijo para que este quedará a la misma altura que él. El menor asintió con una amplia sonrisa en sus labios, contagiando a Hongjoong a su paso—. ¿Y tu papi?

—Ñam ñam—Liberó una pequeña risa para luego removerse levemente en los brazos de su padre, el cual al entender la indirecta, bajó a su hijo.

JaeHwan corrió nuevamente hacía el living para ver su programa favorito, mientras que Hongjoong se dirigió a la cocina, donde apoyó su cuerpo en la pared para ver fijamente como su novio se movía de un lado para otro preparando la cena. El castaño aún no se daba cuenta de la presencia del mayor, por lo cual se podía escuchar como este cantaba una canción random, deiletando al pelinegro con su angelical voz.

—Wow —Seonghwa se sobresaltó ante aquel repentino comentario, por lo que volteó sorprendido con su cuerpo algo tenso. Hongjoong sonrió ampliamente—, no sabía que mi novio cantaba tan hermoso.

El castaño pudo liberar todo el aire que había retenido mediante un suspiro. No tardó en devolverle la sonrisa a su novio, dando pequeños pasos hacía él para abrazarlo por el cuello.

—Me has tomado por sorpresa —Rió bajo, dejando un casto beso en los labios opuestos—. ¿Te ha ido bien hoy?

—Estuvo normal —Tomó con sus manos el rostro de su novio para acariciar sus mejillas y labios. Seonghwa suspiró con satisfacción ante las caricias—. Los extrañé demasiado; si fuera por mí, los llevaría a ambos en una pequeña cajita de cristal para que me acompañaran a todos lados.

Seonghwa liberó una carcajada a medida que se daba media vuelta para seguir con lo suyo, aunque Hongjoong no tardó en seguirlo por detrás para abrazarlo por la espalda y apoyar su mentón en el hombro de su chico.

Simplemente no quería separarse de él. Tener a Seonghwa entre sus brazos era el sentimiento más lindo del mundo; sentir su dulce aroma —incluso si aveces no utilizaba perfume— inundar sus fosas naseles, era tan satisfactorio como oler el café recién echo por la mañana; mientras que su voz era la música favorita para sus oídos.