Meliodas es dueño de una empresa muy importante y necesita una acompañante por lo que hará un trato con la madre de Elizabeth para fingir una relación para no afectar a su empresa
Pero lo que no saben es que la familia de elizabeth no sabía del trato
El tiempo había pasado y su relación era un poco más estable, debido a sus sentimientos y a las reuniones que acostumbraban ir Meliodas veia cada vez menos a zaneri
Elizabeth no había preguntado por su padre por que Meliodas le había dicho que su tratamiento llevaría tiempo, pero decidió preguntar como estaba, ya era tiempo de saber algo de él
Una mañana meliodas no había ido al trabajo y elizabeth salió a buscarlo para preguntar algo
Elizabeth llamó a la puerta de la biblioteca
Elizabeth : dís-disculpe señor meliodas, puedo pasar?
Meliodas : Claro, dime elizabeth
Elizabeth : hace un año que no veo a mi padre, y quisiera saber como esta por lo de su enfermedad
Meliodas : bueno, el ya esta un poco mejor, lo trasladaron a danafor
Elizabeth : por qué no me lo había dicho? Cuando pasó eso?
Meliodas : eso fue la semana pasada, y no te lo dije por que dejare que lo veas personalmente
Elizabeth : de verdad?, muchas gracias señor meliodas
Elizabeth se abalanzó a Meliodas y le dio un abrazo con todas sus fuerzas, esta feliz Meliodas se sorprendió del acto de la chica, pero no pudo evitar sentirse feliz al ver la sinceridad de elizabeth
El realmente quería tenerla para siempre pero sabía que debía ver a su padre
Elizabeth : dís-disculpeme n-no era mi in-intención
Meliodas : no te preocupes, te llevarán en mi jet privado, te iras a la hora que decidas
Elizabeth : de verdad muchas gracias
Elizabeth salió de la biblioteca feliz, meliodas por su parte se arrepentía de haberle dicho que iría sola pero necesitaba estar a solas con su padre
Meliodas : maldita sea, por que siento esto?, y por que la deje ir sola? (pensó)
Elizabeth estaba muy feliz, salió al jardín, le gustaba estar ahí, los hijos de las sirvientas jugaban con ella, incluso se metieron a la fuente que estaba en ese lugar
Meliodas había acabado con su trabajo y decidió salir a distraerse, cuando llegó al jardín vio a elizabeth en la fuente, le pareció un verdadero ángel, se veía hermosa con esas pequeñas gotas de agua El verla así le provocaba ternura y al mismo tiempo lujuria
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Meliodas : eres tan hermosa mi pequeña eli, si tan solo... Ahh, carajo, por que no puedo hacerte mia (pensó, hasta que una voz lo sacó de sus pensamientos)
