Un ejemplo de alguien que si tenía a Dios en primer lugar y sobre todo en su corazón, fue Abraham. En Génesis 22 Dios habla a Abraham y le dice "Abraham, toma a Isaac, tu amado hijo único, ve a la tierra de Moaria y ofrécelo como un sacrificio que debe quemarse completamente, en la montaña que yo te indicaré", Dios estaba mandando a Abraham a quemar a su hijo amado, estaba pidiendo a Abraham que entregue de la manera más dolorosa a su riqueza mas importante, su hijo, y lo impresionante acá es que Abraham va dispuesto a entregarlo todo por Dios.
Pero Dios detiene este acto, Dios envía a un ángel para que lo detenga, porque el Señor no necesita tus riquezas, estoy segura de que si aquel joven rico hubiera juntado todas sus riquezas y las hubiera llevado allá donde estaban los pobres, quizás Dios lo detenía como a Abraham y le decía "Deténte, porque ahora sé que temes a Dios, porque ahora sé que Dios está en tu corazón y en primer lugar".
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Difícilmente entrará un rico en el reino de los cielos
SpiritualEsta es una prédica escrita sobre la parábola del joven rico, comparado con Abraham. Se basa en las riquezas, lo que atesoramos en la Tierra y lo que atesoramos en el Reino de los Cielos.