Capitulo 9

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CAPITULO 9: AL LÍMITE

Me pone furioso el que me ignores cuando sabes que muero de ganas por ti y más me pone furioso que toda tu atención no esté exclusivamente dirigida a mí.

🍁

No puede existir día mas incomodo que despertar en la cama del chico que te gusta, encontrar a sus padres en el momento que precisas irte y que te pregunten si pasaron la noche juntos.

—Eh... yo solo me dormí.

— ¿En serio? Mira que no queremos nietos antes de tiempo—sus brazos se cruzan debajo de su pecho y trato de mantenerle la mirada a la madre de Can que muestra ser una mujer estricta.

—Madre, la asustas—Can llega pasando su brazo por sus hombros y me lleva—no les hagas caso, tienen una severa obsesión con que yo no tenga hijos tan joven.

Siento un alivió por haberme salvado de esa conversación tan vergonzosa.

—Ya veo—tomo asiento en el banco y una chica del servicio coloca una taza de café delante de mí, seguido de waffles con crema y fresas—Gracias.

— ¿Recuerdas lo que paso anoche? —le miro de reojo y ruego que no sea algo vergonzoso. Niego y soplo el café y el suspira.

Volteo la cara para mirarlo.

>>Step intento sobrepasarse contigo—mira al frente evitando mis ojos y miro mi café con el ceño fruncido—gracias a Dios que te buscaba y vi lo que pretendía, si hubiera sabido que él iba a hacer eso no lo hubiera invitado.

Asiento y me apresuro a comer las fresas. Me siento rara, no recuerdo nada y en parte yo tengo la culpa ya que no debí beber demasiado.

>> ¿Estás bien? —asiento. No estoy respondiendo con sinceridad pero no puedo decirlo, eso de que Step... siempre lo sospeche pero nunca creí que fuera capaz.

— ¿Podrías llamarme un taxi?

— ¿Un taxi? —Repite—yo te llevo cuando termines de desayunar—aprieta mi mano antes de irse y un cosquilleo queda en mi mano no por mucho tiempo porque la repulsión por lo que pudo pasar me toma.

Al llegar a casa me despido de Can y le doy las gracias por traerme, mientras ingreso a mi casa pienso en lo bueno que es, no dejo que me hicieran nada y me protegió. Cualquier chica se sentiría segura a su lado y sería muy afortunada.

Suspiro con cansancio, es un poco triste para mí que Can me vea solo como a una amiga y no como alguien más, aunque me conformo con su amistad quisiera que él me viera con otros ojos, pero ya eso es mucho pedir.

Debo conformarme meramente con su amistad y ya con el tiempo mis sentimientos no recíprocos desaparecerán por siempre, y se convertirán en un bonito recuerdo de mi adolescencia.

**

Mis últimos días desde la fiesta los he pasado estudiando, ya que las semanas de exámenes están que tocan mi puerta. No he podido descansar, sumando a eso que aun no encuentro trabajo.

Ya he buscado en tiendas de ropa, zapatos, farmacias y nada, no sé qué hacer, ya recibí mi primer reporte por no haber cancelado la primera mensualidad.

—Supongo que no has contestado mis mensajes porque estas muy ocupada y no porque te has conseguido un nuevo y sexy amigo.

Alzo una ceja y le miro con una sonrisa cálida.

—Nunca te cambiaria.

—Así se dice y a la final ya ni se acuerdan de uno—le doy un puño en el brazo y mis ojos viajan a la persona que va cruzando el comedor. Can mira lo que veo y luego ve de forma seria.

BLUEBERRY +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora