Asuntos pendientes

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Narrador omnipresente

-Por favor no lo hagas- pidió con desespero el joven mago

-¿Por qué no lo haría?- pregunto con descaro Elizabeth Hastings

-Por favor- repitió el merodeador 

-Tu lo puedes simplificar- sonrío con malicia la rubia- vamos amor, tu y yo sabemos que estamos destinados a estar juntos, lo supiste en tercer año y lo sabes ahora, somos la pareja perfecta, porque no vuelves conmigo y te olvidas de la insípida de Evans

-No le digas- comenzó a molestarse el castaño

-¿Qué no le diga así?- interrumpió con fuerza- agradece que soy amable, porque no sabes todo lo que tengo que decir de esa idiotita 

-Elizabeth basta- pidió con fuerza- dame mi libro 

-¿por que tienes que complicarlo todo?- preguntó con una sonrisa inocente pero un tono cansado- te conozco, y sé que no ves a Evans como más que un capricho

-No Elizabeth- gritó, eso lo había sacado de sus casillas, si bien hace poco reconoció lo mucho que está enamorado de Evans, James sabía desde hace mucho tiempo, que la única mujer de su vida, siempre fue, es y será Lily Evans, tal vez por esto la molestaba y trataba de llamar su atención, y es que James Potter siempre necesito de Lily Evans

-Me da mucha pena que no reconozcas que la única mujer que estuvo y estará contigo soy yo, espero que cambies cuando estes conmigo, porque no me gusta que solo ilusiones a Evans

-Entiende que yo no la ilusiono, ella lo hace conmigo, y es que cada día estoy más enamorado de ella- gritó tan fuerte que tal vez todo Hogsmeade lo escucho

-Tu estas enamorado de mi- grito ahora Elizabeth con ira y rabia acumulada

-No no es cierto, yo nunca te ame y mi mas grande error fue sin duda alguna vez pedirte que seas mi novia- gritó con ira, James no es malo pero si muy impulsivo, por esta última razón el no premedito bien sus palabras, al ver a la joven bruja poner sus ojos triste y contener algunas lágrimas, se arrepintió por lo que dijo, no sentía las palabras pues estas eran verdad, más sentía él como las dijo y el cómo afectó esto a la joven rubia- lo siento no quise

-Lo dijiste- escupió con ira- y sabes que, nadie se burla de una Hastings, quieres tu estúpido libro, pues toma- lo arrojó hacia su cabeza- solo quiero que sepas que esto no se quedará así- la rubia salió del callejón en donde estaban y meneando las caderas furiosa se fue hacia el castillo.

James aun un poco avergonzado de lo ocurrido, siguió el ejemplo de Elizabeth y salió del callejón con la edición gastada del principito bien abrazada a su cuerpo, él escondió una pequeña sonrisa, pues estaba pensando en que tal vez, gracias a ese incidente, se desharía de una vez y para siempre de la insistente de Elizabeth Hastings, mas el no sabia que una mujer como "Lizzie" no dejará las cosas así.

Hastings era una chica muy lista y una estratega muy brillante, más James parecía nublar su juicio, pues parecía cegada al hecho de que James Potter amaba a Lily Evans, hace unas semanas, ella ideo un plan que describió como perfecto, y básicamente se trataba de hacer ver a James que ella es la indicada, más al no obtener resultado alguno, descarto el coqueteo sutil, ahora opto por un método distinto, el acoso.

Siguió y observó al merodeador por casi dos semanas, esto le resultó difícil puesto que el merodeador no es alguien monótono, todos los días hacia algo totalmente diferente, más un patrón que la rubia si pudo notar, es la constante "coincidencia" que había entre él y Evans, a diferencia de James, Lily era muy organizada, parecía tener todo su día planeado y James estaba al tanto de esto, se tomaba la molestia de llegar unos minutos antes al lugar en el que sorprendentemente Lily estaría, él parecía ser un legeremante de primera, pues era capaz de saber cuándo y dónde estaría la pelirroja, más la enorme inteligencia de la rubia, la hizo darse cuenta de que no era complicada magia lo que James hacía, sino más bien un curioso libro que Elizabeth siempre notaba en las manos del merodeador, al principio pensó que aquel libro de la literatura muggle era muy difícil de entender, puesto que el merodeador repetía sus páginas una y otra vez, pero con su gran cerebro noto que era de hecho el manual de acoso de Lily Evans, con los días fue entendiendo que hacía tan especial ese libro.

Una tarde de descuido, Hastings robo aquella posesión tan preciada del merodeador, y el poco a poco fue perdiendo la cabeza, pasaba días y noches buscándolo, hasta que en el tercer día se culpo por extraviarlo, sin embargo cuando recibió una pequeña nota escrita en un pedazo arrancado del libro, lo supo, no se había perdido, se lo habían robado, desesperado busco al culpable, y al aparecer Elizabeth Hastings, su ex novia, lo entendió todo, llevo días rogándole que se lo devolviera, pero ella amenazó con decirle a Lily todo lo que él estaba haciendo, si él no aceptaba volver otra vez con ella, luego de todo esto, James se sintió aliviado de que por fin acabara, aunque bueno una ex algo loca, es un muy temible enemigo.

James metió las manos en sus bolsillos al sentir un viento helado rozar con su cuerpo y con rapidez entró nuevamente a las tres escobas y la mirada atenta de todos sus amigos lo recibieron.

-¿Qué es lo que quería Lizzie eh James?- preguntó Peter con picardía ajeno a casi todo lo que pasaba a su alrededor

-Algo que espero haya acabado toda relación que yo alguna vez tuve con ella- respondió el castaño mirando a Sirius como diciendo "el trabajo está hecho", Canuto entendió de inmediato y supo que la pesadilla de Hastings había terminado, claro que la pesadilla apenas comenzaba, pero esto aún no lo sabían

-¿Y qué hicieron cuando me fui? ¿me extrañaste peli?- pregunto poniendo su mano en su mejilla y olvidando por completo el mal rato que había pasado 

-Ja ja ja- rió Lily con ironía- ya quisieras que yo te extrañe- sentenció con la misma sonrisa que le dio a James momentos antes de que saliera con Elizabeth 

- Tu mueres por mí- afirmó viéndola a los ojos e ignorando a todos los que estaban en la mesa 

-En tus sueños Potter- rodó divertida los ojos

-En mis sueños tu ya te decidiste por mi- coqueteo Potter

-Y seguirá siendo solo un sueño, por que eso jamás pasará- aseguró Lily 

-Ya veremos Evans, ya veremos- retó James con esa actitud tan característica de él 

-Bueno tortolitos- interrumpió abruptamente Sirius, rompiendo el contacto visual de ambos magos para llevarse una mirada avergonzada por parte de la pelirroja y una asesina por parte del castaño- será mejor que ya nos vayamos, mañana tenemos el partido contra Slytherin y debemos levantarnos temprano- recordó el pelinegro 

Golpeado por la realidad, James rápido se levantó, con todo el tema de Elizabeth y la boda, James había estado un poco ausente de sus deberes de capitán del equipo, cosa que nunca antes había pasado, puesto que el merodeador es conocido por ser uno de los más estrictos y mejores capitanes que la casa de los leones haya tenido, desde que asumió su puesto a principios de año, todos los jugadores mejoraron su nivel, y todos los partidos que han jugado ya sean oficiales o amistosos, han sido ganados por el equipo de Gryffindor,  más esta semana tan intensa para el merodeador, había sido la clara demostración que lo más importante en la cabeza y el corazón del joven Potter, era Lily Evans


*Heyyy, gracias a los que están siguiendo esta historia, se que he tardado un poco en publicar pero mi universidad no me lo permitia, ahora que tengo mas tiempo, espero poder subir mas capitulos en menos tiempo, por si a alguien le interesa, escribi una historia jily, son  one shots que no tienen que ver con esta historia pero me parecen interesantes, se encuentra en mi perfil y ya tiene dos capítulos publicados*

James y Lily ¨Mencione que te amo¨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora