CAPITULO 3

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POV. LENA
 
Era la hora del almuerzo, fui con Nia a la cafeteria, nos sentamos en una de las mesas.
 
 
—Nia, ¿puedes llevar a mis hermanos a mi casa cuando acaben las clases? -le pregunté.
 
—Sí, claro, no hay problema pero diles que me esperen en las escaleras- dijo comiendo el último trozo de su bocadillo y abriendo el zumo de naranja que tenía en las manos.
 
 
— Vale, yo les aviso, Nia— me miró- respira, que vas a terminar ahogándote. ¿Tienes que irte a algún sitio?
 
— La verdad es que sí, la orientadora me ha citado para hablar de universidades.me informó.
 
 
— ¿Universidades? Pero si aún queda mucho para que nos graduemos.—me miró y levantó los hombros.
 
—No queda tanto, tú también deberías pensar donde vas a ir al salir de aquí y que es lo que quieres hacer con tu vida.— dijo como si fuera mi madre.
 
 
—Ya Nia; no seas tan intensa, ahora mismo lo único que quiero es que acabe este día de mierda e irme a mi casa, pero no puedo por culpa del castigo con Danvers. ¡Vaya! Parece que la invoco.— dije cuando la vi entrar con su séquito de barbies por la puerta de la cafetería.
 
—Lena, ¿Puedo preguntarte algo?—dijo.
 
—Ya lo estás haciendo ¿no? —ella sonrió.
 
 
—No quiero que te lo tomes a mal.
 
—Venga Nia, no des más vueltas, pregunta lo que quieras.
 
Me hacía gracia como ania siempre que quería preguntarme algo que creía que me enfadaría empezaba con un ¨¿Puedo preguntarte algo?
 
 
—¿Qué te pasa con Danvers?—la miré con cara extraña.
 
—¿Tú no tenías que ir a hablar con la orientadora de universidades?— dije para evitar contestarle.
 
 
—Hablo en serio, Lena. ¿Qué pasa con...?— ,miró hacia la mesa de Kara, quien reía con sus amigas.
 
—Nia, ¿a qué viene esa pregunta? Sabes que no nos llevamos bien y ya está, eso es lo único que pasa.
 
 
—Sé que no es tu persona favorita en el mundo pero Lena hoy casi os pegáis en clase. ¿Qué te pasa? ¿Acaso eres tonta?— me dijo muy seria. Nia era la única persona a la que dejaba que me hablara así. —En serio ¿En qué piensas? Este mes ya te has peleado con ella unas veinte veces. El director está aburrido de castigaros, sabes que te pueden quitar la beca si sigues así ¿no? ¿Es eso lo que quieres, Lauren? —estaba enfadada.
 
Pocas veces había visto a Nia enfadada.
 
 
Muy bien Lena, Nia, la chica que solo se enfada una vez al año, está enfadada. Y es por tu culpa.
 
—No, no es lo que quiero y tampoco sabía lo de la beca. Lo siento. Pero es ella la que empieza.
 
 
—No, Lena no me vengas con esas... Ella empieza, tú terminas, ella termina y tú empiezas. Lena, eso no importa, porque aunque odie admitirlo, la única perjudicada eres tú, ella tiene dinero, ¿a quién crees que expulsaran antes. Ehh?
 
Era obvio que a mí.
 
 
—Vale, Nia dejemos el tema aquí, llegarás tarde a tu reunión.
 
          
 
—Lo siento por enfadarme, pero no soportaría graduarme sin mi mejor amiga, tienes que controlarte más, sé que no la soportas pero haz un esfuerzo.— asentí, aunque dentro de mí sabía que por más que quisiera hacer ese esfuerzo por una cosa o por otra acabaría a los fritos con Danvers. —Avisa a tus hermanos ¿sí? Y pórtate bien— me dio un golpe en el brazo y se fue.
 
Increíble, yo la hago enfadar y es ella la que me pide perdón.
 
 
Acabé de almorzar; aún quedaban quince minutos para que el descanso acabase así que decidí avisar a mis hermanos.
 
Los busqué por la cafetería con la mirada cuando me topé con los ojos Azules de Kara, al darnos cuenta ambas agachamos la mirada.
 
 
¿Me estaba mirando?
 
¿Por qué me miraría Danvers?
 
No, no me miraba. Lena te estás volviendo loca.
 
 
No, definitivamente Kara no me...
 
¿Kara?
 
¿Desde cuándo le llamas Kara?
 
Danvers no me había mirado.
 
 
O ¿Sí?
 
Volví a mirarla pero ella ya no estaba.
 
 
A lo lejos vi a mi hermano Lex sentado en una mesa con unas cuantas animadoras y chicos de diferentes equipos.
 
Fui hasta su mesa.
 
—Lex— le llamé cuando estaba frente a él, noté que todo el mundo se calló cuando me vieron. Me tienen miedo, eso está bien— Lex— lo volví a llamar ya que estaba muy ocupado susurrándole algo a una rubia.
 
—¿Qué?— la animadora se apartó de él cuando me vio.
 
 
Haces bien en separarte rubita.
 
—Me tengo que quedar después de clase, no puedo llevaros a casa, Nia lo hará. Esperadla en las escaleras de la entrada.
 
—Vale, adiós.— dijo.
 
 
No sé porque me dio la sensación de que me estaba echando.
 
Levanté las cejas sorprendida por su tono, si no fuera mi hermano ya tendría mi puño en su cara, me estaba yendo cuando giré de nuevo hacia la mesa.
 
—¿Sabes dónde está Lauren?
 
 
— Allí.—señaló a una mesa donde estaba mi hermana y la chica de la camisa azul de cuadros.
 
—Vale, gracias.— me dirigí a la mesa de Lauren. Una vez allí me senté a su lado. —Hola, hermaaana— dije mientras ponía mi brazo sobre sus hombros.
 
 
—Hola, Lena.— me dijo nerviosa —¿Qué haces aquí?.— dijo
 
—Vengo a avisarte que os iréis con Nia porque me tengo que quedar después de clase, esperadla en las escaleras.
 
—¿Otra vez te han castigado?
 
 
—Puede ser.—Lauren levantó una ceja.— Vale, si, me han castigado. No preguntes.
 
La chica que estaba enfrente nuestra nos observaba tímidamente.
 
 
—Hola, amiga. ¿Tú quien eres?— le dije
 
—Ohh. No, por favor...—susurró mi hermana para ella misma y sonreí.
 
 
—Soy...Soy Cam... Soy Camila.— dijo la chica. Me encanta poner nerviosa a la gente.
 
           
 
—Así que tú eres Camila...— la chica me miró con miedo y asintió. —Y dime, ¿de verdad mi hermana es tan perfecta como aparenta? Vamos, confiesa mujer que estamos en confianza, ¿alguna vez ha hecho una locura? ¿Ha copiado alguna vez en un examen?— dije dramáticamente como si copiar fuera un crimen de primer grado. Miré a Lauren que en ese momento quería que la tierra la tragara. La chica negó con la cabeza.— Ohh pues vaya mierda, ahora yo iré a casa con un castigo y tú con el título de miss perfección, perfecto.— le dije a Lauren.
 
 
Noté como los alumnos que estaban en la cafetería nos miraban. No solía interactuar con muchas personas en el instituto y menos de cursos inferiores.
 
—Lena, yo no soy perfecta, las personas que están en esa mesa lo son, —señaló —yo no— me giré a la mesa que mi hermana había señalado. No puede ser, Danvers estaba allí.
 
¿Pero no se había ido ya?
 
 
—Mira, Lauren, los de esa mes...- empecé a decir pero Camila me interrumpió.
 
 
—Lauren por favor, no digas eso, eres perfecta por dentro y por fuera... esa mesa solo está llena de personas sin cerebro.— dijo rápidamente, cuando acabó se puso roja, mi hermana sonrió debido a las palabras de la chica.
 
Me gusta esta chica .
 
 
—Amén a eso hermana.— le dije subiendo la mano para que me chocara y eso hizo. —Bueno, pareja, yo me voy. Adiós Lauren. Un placer conocerte al fin Camila.
 
Cuando me alejaba Lauren me llamó y yo me paré.
 
 
—No sé que acaba de pasar en esa mesa pero gracias.— me dio un abrazo.
 
—¿Qué esperabas que te dejara en ridículo delante de ella?—le dije cuando nos separamos. Ella asintió.— Tranquila, eso lo reservo para cuando sea tu novia formal. —Le guiñe un ojo y me fui.
 
 
 
 
 
***************
 
 
POV. KARA
 
Llegamos tarde a la clase siguiente pero por suerte el profesor nos dejó entrar. Cuando me quise dar cuanta la clase ya había terminado.
 
—Kara, debes pensar seriamente en ponerte un guardaespaldas, esa Luthor te va a matar un día de estos.— dijo Imra
 
 
—¿Para qué necesita guardaespaldas si me tiene a mí?— dijo James acercándose a mí.
 
—Por favor, chicos, esa no puede tocarme; además, si lo intentara estaría fuera de aquí en menos de diez segundos.
 
—Pero hoy casi te pega.
 
 
—Caitlin, por favor, Lutor me tiene miedo, nunca me haría nada, es todo apariencia, intenta hacerse la rebelde y no le sale, pobrecita.
 
—¿Apariencia? Pregúntale a Jack, el capitán del equipo de baloncesto, a ver si él piensa que lo de Luthor es apariencia.
 
— ¿Por qué dices eso?— Imra  preguntó curiosa.
 
 
—¿No le habéis visto la cara? Lleva un ojo morado... y si sigues así, Kara, tú serás la siguiente.
 
— Yo no le tengo miedo a la patética esa.
 
Entramos a la cafetería y nos sentamos en la mesa de siempre. En un momento entró Jack, lo miré.
 
 
Auuch eso debía doler. ¿Por qué mierdas le pegaría?
 
          
 
Me levanté de la mesa y me acerqué a él.
 
 
—¡Hey! ¡Jack! ¿Qué te ha pasado en la cara?— dije tocándole la mejilla.
 
—Nada, fue un golpe tonto.— me dijo intentando quitarle importancia al asunto.
 
— Fue Luthor¿no? ¿Por qué te hizo eso?— le pregunté acercándome más a él.
 
—Kara, si lo sabes para que preguntas. —dijo acercando su cara a la mía.
 
 
No, chico, no vaya por ese camino. Yo solo quiero información.
 
—Venga dime, ¿Qué pasó?
 
—Te lo cuento a cambio de algo.
 
—Cuéntamelo y después decido si mereces algo o no. —dije con tono coqueto.
 
—Estábamos los chicos del equipo y yo y vimos como Luthor le estaba pegando a una niña pequeña, la niña lloraba y entonces fui para que dejara de hacerlo, entonces cuando le dije que parara me pegó a mí.
 
 
Luthor. ¿Pegarle a una niña? Eso no puede ser, he visto como trata a mi hermana cuando va a cuidarla, se puede decir que cuando está con Lara, llega a parecer una persona normal. Estoy segura de que Jack se lo ha inventado.
 
Aunque pensándolo bien, Luthor es una persona mentalmente inestable y violente así que no me sorprendería que fuera cierto.
 
 
— Aaaah, eso fue lo que pasó.
 
—Sí, totalmente cierto, si escuchas otra cosa es mentira. Ahora quiero mi recompensa.— Dijo el acercando su boca a la mía. Yo intentaba echarme hacia atrás pero Jack fue más rápido y me sujetó de la cintura. Entré en pánico.
 
 
No me toques. No me gusta que me toquen. Intentaba deshacerme de él.
 
— Mila, ¿Qué haces con este? Vamos a la mesa.— Al ver a James, Jack me soltó.
 
 
Nunca me había alegrado tanto de ver a James.
 
—Nada, vamos James.— Jack soltó un bufido— Lo siento, corazón, perdiste tu oportunidad, haber sido más rápido.— dije, después me fui con James a la mesa.
 
Mis amigas hablaban de ropa y viajes mientras yo pensaba en que me tenía que quedar después de clase castigada, de vez en cuando soltaba algún comentario para que vieran que estaba prestando algo de atención a lo que decían.
 
 
Vi a Lena hablando con Nia, parecía que la estaba riñendo, la escena desde fuera se veía graciosa. Aparté la vista de ellas cuando escuché la voz de Caitlin dirigiéndose a mí.
 
 
—Kara, un día de estos vamos a ir al centro comercial y nos compraremos ropa para el viaje— no lo dijo con tono de estar preguntándome más bien me estaba informando.

Cuestion De TiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora