𝚄𝚗 𝙲𝚊𝚜𝚝𝚒𝚐𝚘 𝙿𝚊𝚛𝚊 𝙼𝚎𝚕𝚔𝚘𝚛

|𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝚃𝚛𝚎𝚜 |

2 𝚂𝚎𝚖𝚊𝚗𝚊𝚜 𝚊𝚗𝚝𝚎𝚜...

──¿Adivina que manwë? ── entró sonriendo con las manos detrás de la espalda.

Manwë suspiro y dejó la revista en la mesa, observó la cara sonriente de su hermano.

──No quiero problemas Melkor ── respondió tomo la revista ya sin ponerle atención.

──Porque siempre me dices que no quieres problemas ──suspiro y camino hacia su hermano. ──No vas adivinar lo que traje? ── se sentó a un lado de su hermano.

"De todos modos no te dejara en paz hasta que le digas algo" pensó.

──Esta bien, dime que tienes hermano ── forzó una sonrisa y esperó.

──Ya que insistes ── sonrió y le quitó la tela a un contenedor de plástico ──esto.

Manwë observó molesto la caja de plástico.

──¿Me quitaste mi tiempo para ver una contenedor vacío? ── preguntó Manwë.

──¿Que?,¿Vacia?

──Que gracioso, ¿que va ha pasar ahora? ── preguntó molesto Manwë.

──No lo entiendo aquí había...

──¡Una serpiente! ── grito Varda desde la cocina.

──¡Varda! ── Manwë corrió  esperando que su esposa estuviera bien.

Cuando ambos llegaron Varda estaba parada en una de las silla de la cocina sumamente asustada.

──¿Donde esta mi mascota? ── preguntó Melkor.

La expresión de Varda paso de asustada a molesta, se levantó y camino hacia Melkor.

──¡Lo sabía!, ¡Sabia que esa cosa asquerosa era tuya!

──¿Estas describiendo a la serpiente o a ti? ──
preguntó divertido Melkor.

──¡Se acabó, yo me voy! ──salio se la cocina y subió escaleras arriba.

──Varda, espera, no tomes decisiones apresuradas ── decía Manwë corrió detrás de ella.

Melkor buscó por la cocina a Smaug, cuando escuchó los pasos de Varda y los de Manwë.

──No te puedes ir así, Varda ──Manwë conminaba detrás se ella.

──Lo siento Manwë pero no puedo vivir en él mismo lugar que Melkor.

──¿Recuerdas lo que prometiste Varda? ──
preguntó Melkor con la serpiente en él cuello.

──Yo a ti no te prometí nada ── respondió Varda molesta.

──A mi no pero a Manwë si ──respondió sonriendo Melkor.

Varda sonrió, camino hasta Manwë, sus mejillas se volvieron rojas.

──En las buenas.

──Y en las malas.──¿Te casarías otra conmigo otra vez, Varda?── preguntó Manwë.

──Si,Manwë, quiero casarme otra vez contigo ──
respondió y beso a su esposo.

Melkor tono a su serpiente y camino escaleras arriba. satisfecho por haberse salido con la suya.

──Lo hicimos Smaug, creó que te quedarás ──
le dijo a la serpiente.

──Ssssss.

──Si,lo se es repugnante, pero me da lo mismo.

──Sssss,sssss,sss.

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Cuando se dio cuenta que era hora de la cena bajo, cuando llegó a la cocina se encontró con una nota sobre la mesa.

Melkor,Varda y yo salinos a dar un paseo, tendrás que hacer tu propia cena.

Manwë.

──Que te parece Smaug ── preguntó Melkor a su serpiente en el hombro.

──Ssss,ssss.

──Suena deliciosos. ── camino hasta el estante y sacó el libro de recetas ──quedate aquí ──dejó a la serpiente en su recipiente.

──Ssss,sss,sss.

──No me hables en ese tono, claro que se cocinar.

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Para cuando Varda y Manwë llegaron vieron a Melkor sentado en la acera rápidamente se acercaron.

──¿Melkor que paso? ── preguntó Manwë.

──Pues descubrí algo ── respondió.

──¿Y que es? ──preguntó Manwë.

──Que no se cocinar.

──Eso podemos verlo ── respondió cortante Varda.

──Pero la buena es que salve a Smaug.

"Se hubieran muerto los dos" pensó Varda.