La chica se llama Mery.
Es alta, con ojos azules y pelo marrón. Viste muy a la moda y parece ser bastante maja y agradable.
Todos la miran con cara
de raros, pero yo le sonrío y fija la mirada en mi. Su mirada es penetrante, y me tenso...
Pero unos segundos después me sonríe y me calmo poco a poco.
La profesora le ordena que se siente al lado mía.