Me despierto de un brinco, sudoroso. Miro la hora, son las cinco de la tarde, y tengo entrenamiento de béisbol a y media en la otra punta de la ciudad. Me visto a toda prisa, cojo en bolso y voy hacia el campo.
Llego. Dejo la mochila y me dispongo a jugar. No me puedo concentrar, empiezo a recordar mi pesadilla cuando Ken me tira la pelota al casco. Y en ese momento vuelvo a la realidad, debo concentrarme, batear correr, batear correr...
Acaba el partido y todos nos dirijimos a los vestuarios:
-Hoy tengo lio, chicos- dice Harry.
-¿ah sí? pues yo no...- Suelta Ken.
-Sí, la chica esta buenisima, me parece que esta noche me voy a divertir- Harry se empieza a reír. Harry siempre se fija en los pechos de las chicas, sus curvas y su culo.
-¿Y tu Nick, tienes fichada a alguna?- dice Ken.
-Si, es una chica llamada Mery, es muy dulce.
Me ducho, me aseo, me cambio y salgo del campo, cuando en la puerta me encuentro a Mery...
