Capitulo 3.

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¡Demonios! ¿Dónde estoy? ¿Qué es este lugar? Oigo a alguien llorando y veo fuego a mí alrededor. Escucho cómo la voz de Cloe me llama. No. Grita por mi auxilio.

-¡Danielle! ¡Danielle ven rápido! –La escucho muy lejos.

-¡Cloe! ¿¡Cloe donde estás!? –No puedo ver nada. El humo está rodeándome, me ahogo, no puedo respirar, me agacho y miro a mi alrededor.- ¡Cloe necesito saber dónde estás, grita por favor!

-¡Danielle! ¡Danielle, estoy aquí! –Escucho su voz muy lejos, pero sé que está más adelante.

-¡Cloe ya voy para allá! ¡Resiste! –Le grito y empiezo a gatear hacia donde está ella.

-¡Danielle apresúrate, él ya viene! ¡Viene por mí Danielle! ¡DANIELLE! –Escucho como el último grito de mi hermana es desgarrado y ya no escucho su voz.

-¿Cloe? ¡Cloe sigue gritando! ¡Cloe dime que estás bien por favor! –Estoy desesperada y gateo más rápido al lugar de donde escuché que provenía su voz la última vez.

-Tranquila Danielle, ella ahora está conmigo. –Escucho la voz de un hombre junto a mí.

Me volteo y lo veo. Es alto. Y a pesar de que está parado solo puedo ver sus ojos, son como dos zafiros. Brillan a través de todo y cortan mi respiración. Todo a mí alrededor se desaparece y yo ya no respiro.

Me despierto con un fuerte grito y noto que tengo la cara mojada. Fue solo una pesadilla. Estoy llorando. Intento calmarme pero de mi boca solo sale un sollozo.

-¡Cloe! ¡Cloe ven un momento por favor! –Grito-Sollozo y mi voz se oye ronca por el sueño.

-Cloe viene corriendo, escucho sus pasos y abre mi puerta de golpe, me ve en la cama sollozando y se sienta junto a mí- ¿Una pesadilla? –Su voz se oye preocupada.

Solo asiento. Me atrae hacia ella y me abraza, sigo llorando en su hombro por un rato cuando me calmo me separo de ella y noto que he mojado toda su camisa.

-Lo siento. –Digo hipando.

-Tranquila hermanita, yo que esperaba que esto no volviera a suceder ¿Por cuánto tiempo habían parado esta vez? –Pregunto frotando mi espalda.

-Ya llevaba 2 meses sin tener una. –Ya estoy un poco calmada, pero aún estoy llorando, ver a Cloe siempre me calma.

-¿De qué se trataba esta vez? –Pregunta con curiosidad. Yo niego, no estoy lista para hablar sobre eso todavía. La abrazo de nuevo y ella me frota la espalda hasta que me quedo más tranquila.

*****

-Cloe cariño el té está listo. –La abuela entra al cuarto y se sienta junto a mí cuando Cloe se levanta para ir a la cocina.

Cuando Cloe sale la abuela coloca una mano en mi pierna y me mira fijamente. Ya habían pasado unas horas desde que tuve la pesadilla, pero igual seguía reviviéndola cada vez que cerraba los ojos.

-¿Cómo estás querida? –Pregunta mi abuela en su natural tono preocupado.

-Sinceramente, mejor. Ya no quiero llorar. Pero esta vez se sintió tan real. Nunca lo había sentido así. –Digo con la vista fija en la pared donde se encuentra el espejo.

Dejo que mis ojos vaguen por la pared y se detengan en el espejo, lo miro fijamente y veo como si una de las hojitas de plata se hubiera movido, solo un poco, casi imperceptible, pero lo suficiente como para ser visto si le prestas atención.

El espejo.(Subiendo y editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora