Emiliano The Humanosaurus Saga Genesis

Capitulo 4: Emiliano Prologue: Jackie Lynn Thomas.

Después de esa espantosa experiencia, Moon y Emiliano caminaron por un rato para encontrar un hogar para quedarse, y hacer de su estadía en la tierra, más cómoda y estable, mientras pase el tiempo que tenga que pasar.

Emiliano: mamí; ¿en dónde nos vamos a quedar, y por cuánto tiempo?

Moon: no lose cariño, de lo que, si estoy segura, es de que no podemos estar cerca de las personas, pues no sabemos de lo que son capaz de hacer en la tierra.

...

Emiliano: está bien madre.

Los 2 siguieron caminando por un buen rato. Hasta que, por fin, pudieron encontrar un lugar para quedarse.

Moon:! mira cariño ¡veo una cueva, hay podemos vivir por un tiempo.

Emiliano: si, por fin, un nuevo hogar.

Emiliano corrió hacia la cueva para refugiarse, así dejando a su madre casi hacia atrás. Muy atrás.

Moon: Emiliano, no corras tato, que tu madre no alcanza esas velocidades. *suspiro* hmm, este niño terco.

Emiliano llego hacia la cueva, para así, contemplar su nuevo hogar, la cueva pese a estar húmeda y algo oscura, se vería bastante acogedora. Y era de sus mejores opciones, ya que el bosque ciertamente no estaba tan seguro.

Emiliano: ... bueno no es como el castillo, pero al menos se ve acogedor.

En eso, un pequeño insecto pasaba al lado de Emiliano. Y lo piso para pretender que no paso nada.

Moon: Bueno, me alegro de que te conformes, por qué es lo último que nos queda.

Emiliano: está bien madre, tú sabes que no soy muy exigente.

Moon: bueno cariño, a descansar, que mañana será un nuevo día en este planeta.

La reina se acostó para dormir, a su vez que acurruco a su hijo a lado suyo para dormirse con él.

Emiliano: buenas noches mamí.

Moon: buenas noches mi principito, mañana será otro día.

Y así, los 2 soñaron augustamente sin miedo alguno. Ciertamente tampoco había de que preocuparse realmente. A la mañana siguiente, él pequeño Emiliano Había despertado de su sueño, y se percató que su madre no estaba. En su lugar había un mediano pero acogedor colchón. Y algunas cosas más a su alrededor. Pero igual se preguntó, en donde estaba su madre.

Emiliano: ¿mamí? mama, ¿dónde estás?

En eso, se abrió un anillo dimensional, en el cual Moon salió de ahí con algunas cosas que consiguió.

Moon: uff, hola, cariño. Perdón por la tardanza, sólo fui a conseguir unas cuantas cosas para el hogar.

Emiliano: ¿oh, y tu trajiste estos muebles?

Moon: si cariño. Si vamos a vivir aquí, por lo menos ahí que hacer de nuestra estadía más cómoda.

Emiliano: Okey ... ¿y que trajiste?

Moon: solo comida, y nueva ropa para usar por ahora. No nos traje nada muy extravagante, pero es acogedora, y pasaremos desapercibidos con esto.

Moon había comprado bastante comida, y su nueva vestimenta. Moon ahora usaba un suéter color purpura, y unos jeans negros, mientras que Emiliano ahora usaría una camisa y shorts azules, y con unos zapatos rojos con líneas y suela blancos. Simple, pero acogedores y normales.