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ᯓ Jisung y SuHyeon son una pareja de
Alfa y omega, su atracción comenzó
desde el momento en que Lee SuHyeon
le cubrió de la lluvia aquella noche de
tormenta, dandose cuenta que SuHyeon
era el alfa con el que debía estar.
Sin saber que su destinad...
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SuHyeon aún no terminaba su ciclo de celo, al contrario los supresores estaban luchando para mantenerlo tranquilo. Corrió escaleras abajo, el maletín de Jisung en su brazo izquierdo y uno extra en el derecho.
Jisung le observó bajar apresuradamente, su ceño se arrugó al ver como este se acercaba de forma demandante ante él.
──Mi padre, él no te quiere aquí, él quiere que encuentre a mi destinado y no estar contigo.
Jisung proceso todo lentamente y luego sintió un dolor en su estómago.
¿Acaso su alfa quería alejarlo?
──¿Qué?, se supone que todo iba bi-bien.
──No, nos iremos.
El brazo de Jisung fue tirado con fuerza, el omega si acaso podía acomodar sus pisadas y al salir de la casona miró el rostro en seriedad de SuHyeon.
Han gimió de dolor al momento en que fue cruelmente metido al auto.
──¡SuHyeon!
Jisung grito, que carajos le pasaba, porqué actuaba de esa forma.
El alfa le ignoró, cerró el auto y dio marcha.
En la mitad del camino, SuHyeon ahora más calmado decidió hablar.
──Te parece un hotel, una casa.
El mayor de brazos cruzados habló.
──Quiero ir a mi casa, ahora.
El alfa esbozó una sonrisa y asintió. Cuando Jisung pudo reconocer su vecindario no dudo en tomar su maleta y buscar las llaves de su casa, no quería estar ni un segundo más con SuHyeon.
Jisung solo espero a que detuviera el auto y corriera a la entrada de su casa, mientras SuHyeon apagaba el auto y buscaba su maleta, Jisung ya estaba dentro de casa, cerrando la puerta principal y asomándose por la ventana.
──¿Sung?
El alfa menor le miró confundido.
──No, aún estas en tu celo y no creas que te dejaré tocarme, no pienses que lo que hiciste ayer fue un error, será mejor que le hagas caso a tu padre y hables con él, solucionen sus problemas SuHyeon.
El omega asustado por cómo sería la reacción del alfa se alejo un poco de la ventana.
──No quería armar un escándalo en tu casa, pero no es la primera vez que me insistes en tener tu celo conmigo o querer que te entregue mi celo, SuHyeon no estoy listo, mi omega no está preparado y no puedo aceptarte.
Jisung hablo con pequeñas lágrimas en la esquina de sus ojos.
──¿Hablas enserio?, ¿Qué te hizo cambiar de opinión nuestros cinco meses juntos?, ¿hay alguien más?
Jisung bajo la mirada y descendieron las lágrimas por su mejilla, por qué SuHyeon no podía encontrar a su omega destinado y dejar libre el camino de Minho, por qué el destino le había dado una mala jugada al enamorarse del hijo de su alfa destinado.
──SuHyeon, es mejor que te vayas.
──¿Estamos terminando?
Jisung asintió con sus ojos cerrados y sus dientes mordiendo su labio inferior con tal de no sollozar.
No quería ver la cara de tristeza por parte de su ahora ex novio.
──Jisung, mírame a la cara y dilo.
El omega le miró tristemente y habló.
──SuHyeon, no quiero ser tu omega.
SuHyeon se acercó a la ventana y le miró.
──¿Por qué?, ¿fue por lo que hice ayer?
──Por eso y porqué encontré a mi alfa destinado, mi omega no puede estar con alguien más, no puedo permitir que sufra por un amor que no estaba planeado, por un alfa el cual mi omega no se sentiría a gusto.
SuHyeon abrió sus ojos y sintió como su corazón cada vez estaba más roto.
──S-sung.
Jisung le quito la mirada.
──¿Conociste a tu destinado?
Han asintió.
──¿Puedo saber quién es?
Jisung negó.
──Solo te pido que te alejes, mi lobo no desea al tuyo, debes seguir tu vida en busca de tu verdadero amor, es mas que obvio que yo no debía estar contigo.
Jisung cerró la ventana y camino directamente a su cama, sin ánimos de querér hacer algo.
Mientras que SuHyeon iba destrozado de camino a casa.
La culpa la tenía por haberse metido en una relación planeada hace más de un siglo.
Tal vez SuHyeon solo fue utilizado para unir el lazo más grande que jamás hayan tenido los Han y los Lee.
Jisung y Minho debían unirse o el futuro de cada lobo descendiente de ambos clanes jamás cambiaría.
Jisung era la salvación para otros omegas y Minho era el orgullo quien tomaba la decisión de seguir con aquella regla o actualizarla de una forma menos cruel y más justa.
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