Capítulo 59

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Luo Xun no estaba feliz en este momento, siendo chismeado por otros. Tenía muchas ganas de encontrar una cuerda para colgar a Zhang Yi en el pasillo, ¡déjalo reflexionar por un día! ¿Necesitaba ir a trabajar? ¡La base podría retrasarse un día más!

Yan Fei tomó la mano de Luo Xun, miró a Zhang Yi y bajó las escaleras. Zhang Yi enarcó una ceja con una sonrisa cada vez más brillante. Sabía que Yan Fei no tomaría medidas contra él, después de todo, eran vecinos. La relación de Luo Xun y Yan Fei habría sido expuesta tarde o temprano.

En lugar de esperar a que lo descubran, lo que podría causar resentimiento en los cinco niños honestos. En cambio, fueron guiados en una dirección alternativa. Los métodos eran sospechosos pero el resultado fue bueno.

Luo Xun solo se sintió vivo de nuevo cuando el grupo de personas se dirigió al cuartel. Al ver a Li Tie y compañía detrás de él, Luo Xun experimentó de repente una profunda sensación de las vicisitudes de la vida.

Yan Fei cerró el auto y palmeó el hombro de Luo Xun; el cuerpo de este último no se había recuperado por completo. Por lo tanto, hoy Yan Fei había conducido el automóvil.

Al ver a Yan Fei mirándolo cuidadosamente, Luo Xun negó levemente con la cabeza. No temía ser conocido por preferir a los hombres, ¿había algo malo en ello? La gente podía reírse de él ahora, pero esperar dos años, ¿con qué frecuencia verían mujeres en la base? ¡Sería demasiado tarde para esperar hasta que solo hubiera hombres alrededor!

Estaba un poco incómodo por el repentino cambio de actitud después de llevarse bien con Li Tie y los demás, además Zhang Yi podía causar problemas en casa ...

"Vamos, subamos al coche y descansemos". Al ver que Luo Xun había recuperado su espíritu, Yan Fei sonrió y señaló la puerta del cuartel.

"¿Por qué hay tanta gente?" Luo Xun se sorprendió al ver a bastantes personas, los vehículos bloquearon la entrada y la gente no sabía qué hacer.

"Parece que las familias rescatadas por la base se mudan hoy". Yan Fei miró a su alrededor y bajó el borde de su sombrero. Todavía llevaba una máscara y, por lo tanto, no tenía miedo de conocer gente.


Los dos hombres encontraron con éxito el camión que tenían que viajar todos los días. El conductor los saludó antes de subir al autobús. No pasó mucho tiempo antes de que el capitán se uniera a su equipo. Después de subir al autobús, algunos soldados familiares sonrieron al ver a Luo Xun hoy. "¿Estás mejor hoy?"

Luo Xun sonrió y asintió. "Ayer tuve un poco de resfriado. Mucho mejor después de descansar un día".

"Por el momento, no se esfuerce. No sea terco ante el peligro". El capitán también le aconsejó. Después de todo, la situación no era demasiado peligrosa y un cuerpo sano sería más útil en el futuro. No había necesidad de que Luo Xun se esforzara mientras no estaba completamente sano.

Luo Xun asintió, sabía que había mucha mano de obra. Sin sorpresas significaba que no tenía que apresurarse. Solo tenía que mantenerse cerca de Yan Fei como de costumbre y asegurarse de que ningún zombis se apresurara a la multitud.

Dentro de la puerta de la base, la multitud y el número de tiendas había disminuido ligeramente que antes. Se estimó que se dispersaron a otros lugares, tal vez algunas personas se habían mudado a los edificios recién limpiados.

Algunos coches estaban aparcados en la zona de la que eran responsables. Comenzaron su rutina diaria de trabajo, Yan Fei estaba en medio de un descanso cuando el capitán al ver que la situación estaba bien, de repente recordó algunas noticias anteriores. Se acercó a Yan Fei y le preguntó. "Ah, escuché ayer que un líder de la base de apellido Yan estaba buscando a su hijo. ¿Tenía más o menos tu edad o algo así? ¿Eres de la ciudad?"

Código de práctica del renacido otaku en el apocalipsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora