1

5.5K 496 100
                                    

Katsuki Bakugou era conocido por ser una persona un tanto mal hablada, orgulloso y sin sentimientos, su madre incluso ya llegaba a pensar que su hijo era asexual, no le daría nietos y se quedaría solo, todos los días se lamentaba con su esposo.

Pero volviendo al protagonista de nuestro relato, Katsuki se encontraba comiendo un helado de fresa en el parque cerca de su casa, el día estaba tranquilo y eso le hacía sentir relajado, sus pesados amigos estaban ocupados reparando materias y sus padres de luna de miel, así que el podía tomarse un descanso para si mismo.

El día estaba soleado, la brisa de verano chocaba suave contra su rostro y las risas de los niños jugando se escuchaban de fondo. A Katsuki le gustaban los niños, podía ser un amargado pero los niños le hacían sentir una tremenda ternura por esas bolitas de carne y ojos grandes e inocentes.

Sin embargo, habían límites, como justo ahora.

—. Oiga, señor bonito — dijo una niña de cabellos blancos que jalaba su pantalón para llamar su atención —, mi hermano dice que le gusta — soltó sonriente para seguidamente irse, siguió a la niña con la mirada y la vio sentarse en el arenero con un niño de cabellos azules en punta.

Katsuki quedó con cara de "¿WTF?", por Dios era un mocoso, y el tenía 16, era ilegal por donde lo vieras. Sin embargo, se acercó al puesto de helados y compró dos, se acercó a los niños y se los dio, luego rechazo lo mas dulce posible al niño para irse.

Se encontraba caminando a la salida cuando escucho un grito, —. ¡Señor bonito! — era la niña de antes, que se encontraba en los brazos (musculosos, cabe recalcar) de un chico de amable sonrisa, ojos y cabellos verdes —, ¡Este es mi hermano, se llama Izuku! — el peli verde saludo con una mano y le guiño el ojo. Dios, que alguien lo atrape, siente que se le subieron todos los colores a la cara.

El mismo de niño que antes había pensado había sido el dueño del mensaje se le acercó y le tendió un papel doblado a la mitad. Una vez lo tomó el niño se fue a tomar la mano de su hermano y vio como se iban por la salida contraria a la de él.

Abrió el papel que le dio el mocoso y abrió su boca impresionado.

+XX XXXXX
Izuku. Call me ;)

Dios y el diablo saben que lo llamara, ese tipo está demasiado bueno y él demasiado virgen, vuelve a tomar camino pensando que jamás lo había visto y que sus rasgos eran extranjeros. Sonrió grande.

No sólo es guapo y condenadamente caliente, sino que también extranjero. Bien hecho Katsuki, pescaste uno grande. Pensó

¿O él me pesco a mí? Bah, no importa.

Bendito sea que quisiera ir al parque ese día y los helados que le dio a los niños.

Coqueta y Divertida Vida - Dekukatsudeku (Terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora