𝗕𝗔𝗧𝗧𝗟𝗘 𝗖𝗥𝗬 ; twd

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❝             black blood         ❞

『        sangre negra      』

Los hermanos Dixon entraron a la casa grande escuchando sin mucha atención el plan que su líder tenía para el chico que habían rescatado ese mismo día, el asiático abrió la puerta llamando la atención de todos los que estaba presentes viendo a Liliana desviar su mirada al chocar con la de él causando una mueca de tristeza en su rostro.

— Está bien, buscaré flores y chocolate para cuando despierte — comentó el calvo con sarcasmo devolviendo a Dixon a la misma realidad donde estaban, la menor alzó una ceja al notar el enojo que se estaba causando en el dueño.

— Sabes, ni siquiera hemos hablado del granero — Shane se detuvo girando su cuerpo sin entender las palabras del anciano, Hershel se acercó dejando el trapo que sostenía en sus manos — quería echarte de mis tierras pero Rick me convenció de no hacerlo, así que haznos un favor y cierra la boca.

Liliana no pudo evitar soltar una pequeña risa para llamar la atención del calvo quien salió con enojo de la casa. La menor soltó aire elevándose al mismo tiempo que todos para imitar a Shane, él asiático caminó siguiendo a la castaña.

— ¿Ahora vas a ignorarme? — preguntó Glenn con un tono bajo logrando que la ojíverde se detuviera de golpe girando su cuerpo para quedar de frente, su mirada se profundizó causando temor en el coreano.

— Pensé que eso querías — lo examinó continuando su camino sin prestarle atención.

— No, claro que no —  tomó sus manos viendo sus mechones de cabello moverse por toda su cabeza debido al aire que hacía. — Lo lamento, no quiero que me ignores.

— Lo hacía antes, no entiendo porque ahora te importa. — se soltó de su agarre dirigiéndose al río de las historias que le contaba Maggie.

Era realmente gigante, la menor se acercó viendo la altura que separaba su cuerpo con el agua teniendo que retroceder por miedo.

El dolor se hizo presente en el pecho de Liliana teniendo que levantarse con fuerza y un gran ritmo cardiaco, suspiró calmando su respiración para volver a recostarse en su tienda. Abrió el cierre dándose cuenta que por la tardanza del sol aún era de madrugada.

Sintió el sudor frío recorrer su frente al igual que varias corrientes pasarle por la espalda, colocó su cuerpo en posición fetal juntándose con su hermano mayor.

— Daryl.. — susurró moviendo sus manos para poder entrar a su pecho, él nombrado hizo un ruido con sueño y queriendo seguir durmiendo en ese momento. — tuve una pesadilla.

— ¿Una pesadilla? — preguntó con voz ronca sin poder abrir los ojos, aceptó el contacto con su hermana quedando como una mujer embarazada y su hija en desarrollo.

— Tengo miedo. Estoy muy asustada. — soltó apretando sus brazos sin ver el semblante confuso de Dixon, él mayor acarició su cabello aún en su sueño profundo.

— Sea lo que sea, lo mataré antes que pueda tocarte o lastimarte. — hablo con un tono serio, Liliana asintió quedando profundamente dormida.

Después de varias horas la menor se abrió sus ojos notando que su hermano ya no estaba en la tienda por lo que se colocó sus botas saliendo del lugar para encontrar a Lori teniendo ropa.

— ¿Necesitas ayuda? — se acercó a la mujer con una sonrisa quien negó con la misma siguiendo su trabajo para caminar a la casa.

Dixon avanzó su paso hasta llegar con su hermano mayor, se sentó a su lado tomando una flecha de su ballesta, la examinó por unos segundos volviendo a dejarla.

— ¿No encontraste la tuya? — preguntó el castaño refiriéndose al arma, la ojíverde negó con tristeza dejando caer su cabeza sobre los hombros del mayor. — la buscaremos luego.

Liliana volvió a negar.

— Liliana! — la nombrada se separó de su hermano con rápidez viendo a Maggie correr hasta su lugar con algunas lágrimas en sus ojos y un tono desesperado, la menor se levantó con un semblante confuso. — Beth.. ayuda

Fue lo único que salió de sus labios teniendo como respuesta un movimiento brusco de su parte al correr dentro de la casa, subió las escaleras de par en par siendo Lori la primera en su visión intentando abrir la puerta. Dixon la hizo a un lado dejando caer su cuerpo sobre la puerta abriéndola al instante.

La rubia estaba desorientada con una mano sobre su muñeca donde salía sangre sin poder detenerse. — Lo siento. — Greene se acercó dandole un abrazo caminando a la cama viendo a la ojíverde.

— Yo me encargo — Liliana se sentó a su lado depositando una venda sobre el sangrado para limpiar la herida y detener el líquido, ambas mujeres dejaron sola a Liliana con la menor de los Greene's. 

— Mi mamá murió. — Dixon elevó su rostro viendo a su compañera sin ninguna expresión, seguía desorientada con la mirada perdida, terminó de vendar levantándose a punto de irse pero de detuvo para darle una última visión

— No voy a decirte que mejorará, porque no será así. — cruzó la puerta de su habitación sin dejar de ver a Beth — Seguiremos perdiendo gente, vas a morir, tu padre lo hará, Maggie lo hará y yo también. — soltó aire con fuerza bajando su cabeza al escucharse dando una platica de motivación. — Lo único que podemos hacer es seguir adelante e intentar que nuestra muerte sea lo más tarde posible.

— Cómo es que sigues en pie? — la rubia sollozó dejando caer lágrimas elevando su vista a la dirección de Dixon.

— Los muertos ya no están, y los vivos tienen hambre.

Bajó las escaleras encontrándose al dueño de la granja a punto de subir con su hija, la menor asintió dándole a entender que todo estaba bien saliendo de la casa para ver al asiático cerca del árbol, tomó aire y lo dejó salir acercándose a él.

— Hey. — saludó al notar la presencia de la castaña a su lado, ambos tomaron valor siendo Glenn el primero en romper silencio pero a los pocos segundos de delirar fue interrumpido por la acción de Liliana quien depositó un beso en sus labios. — Wow. Salió mejor de lo que esperaba.

— Basta — sonrío de lado tomando sus mechones de cabello para colocarlos atrás de su oreja,  Glenn metió la mano en su bolsillo sacando una joya que fue conocida por la chica. — ¿Dónde? ¿Cómo es qué.. ?

— La encontré cuando te hirieron, cerca de la iglesia. — la dejó en sus palmas siguiendo con el impacto que tenía Liliana, el collar constaba con dos letras de color gris LD. — Supe que tenía un valor sentimental cuando vi una igual en el cuello de Daryl.

— Son mis iniciales — comentó con emoción sin dejar de ver el aparato. — los tres teníamos una, con nuestras iniciales. MD, DD, LD

Rhee la tomó por la espalda fundiéndose en un profundo abrazo mirando el atardecer junto a un carro acercándose a la granja.