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❝ those who await us ❞
『lo que nos espera』
Liliana se levantó de la cama viendo a su hermano mayor acostado en el suelo, cambió su ropa de dormir a un pantalón de mezclilla junto a una camisa de cuadros.
Recorrió los pasillos llegando al centro de comida encontrando a casi todo su grupo, saludó a la señora Grimes para dejar su anatomía en una silla. El moreno fue hasta ella depositando un plato con huevos.
Agradeció tomando el tenedor y tomar uno de éstos llevándolo a su boca. Luego de varios minutos apareció el meyor junto al líder. Daryl tomó a su hermana de los hombros para sentarse a su lado.
— Papá, ¿tienes resaca? — el pequeño soltó una risa al ver que todos los hicieron por su pregunta.
Asintió con dolor de cabeza tomando unas pastillas que el médico les dio para todo el grupo. Glenn se encontraba haciendo ruidos por la misma causa que el líder. Liliana no pudo evitar reír al verlo con su primer borrachera.
— Nunca me dejen tomar. — habló el asiático viendo a la única persona que estaba con la mirada sobre él, Dixon rió alzando una ceja siguiendo con sus huevos.
Shane entró con el semblante serio viendo a los presentes sin ánimo, el anciano comentó sus rasguños en su cuello causando la instriga de todos.
Seguido del mayor, entró Edwin sirviendo un poco de agua para pasarla por su garganta saludando al grupo.
— No quiero molestar con preguntas tan temprano, sin embargo, lo haré. — dijo el anciano con seriedad.
— No estamos aquí por los huevos.
Guió a todos a otro centro donde estaba una computadora gigante que se encendió por una oración del doctor, la menor prestó atención colocando su cuerpo cerca de su hermano.
Los eventos que eran visibles en la pantalla asombraron a todos, explicó un par de cosas seguido por la muerte de esa persona. El cerebro comenzó a llenarse de una inmensa cosa negra cubriendo el mismo. Al final un disparo pasó por su cabeza dejando al grupo asombrados.
El silencio que hicieron dejó pensar por unos momentos, Daryl sujetó a su hermana de los hombros que estaba impactanda por los eventos previos al igual que su grupo. no había esperanza.
— No queda nada, esto es mundial.— habló la rubia tomando su cabeza entre sus manos, Liliana tembló por unos segundos sentando cu cuerpo en la silla más cercana.
— Sé que son muchas preguntas, Doc. Pero no pude evitar notar que ese reloj va en reversa ¿qué sucederá cuando llegue a cero?
