La serendipia es un descubrimiento o hallazgo afortunado, valioso o inesperado que se produce de manera accidental o casual.
¿̶Q̶u̶é̶ ̶s̶i̶g̶n̶i̶f̶i̶c̶a̶ ̶l̶a̶ ̶s̶e̶r̶e̶n̶d̶i̶p̶i̶a̶ ̶e̶n̶ ̶e̶l̶ ̶a̶m̶o̶r̶?̶
Sencillo, se le otorga a el tipo de relació...
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Chaeyoung Park Roseanne es una joven Australiana, muy linda y dulce, de 17 años. Todos la conocen como Rosé; ya que ese es su diminutivo y algunos piensan que porque al igual que las rosas es tan delicada y hermosa.
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Rosé se levantó esa mañana muy asustada, los últimos días había tenido muchas pesadillas, se levantó de un susto y puso su mano en el pecho mientras apoyaba la otra en el borde de la cama miro el reloj que marcaba las 7:55 am. Decidió levantarse e ir al baño para lavarse los dientes. Solo se lavó la cara y cepillo sus dientes, no se molestó en peinar su largo cabello, ya que la rubia se veía hermosa aun estando desaliñada. Luego bajó a la cocina, tomó de la nevera la leche y se sirvió un vaso e hizo unas tostadas con huevos para completar su desayuno, se sentó en el sofá y encendió el televisor, aunque ella realmente no le estaba prestando atención pues esta estaba concentrada en su celular, estaba revisando los mensajes que tenía sin abrir, su Whatsapp estaba lleno de mensajes no leídos, pero en específico los de sus padres que le habían enviado un montón de comisiones.
—"Buenos días solecito, ¿Cómo amaneciste hoy princesa? –Rosé reprodujo la primera nota de voz que encontró, ella escuchaba atentamente a su madre. –Acabamos de llegar a la casa,habíamos ido de compras, ya sabes para la despensa y me senté a pensar en el comedor; y no sé, eso no se siente bien aquí sin ti. Estar en Australia, es duro si no está mi familia completa –Rosé bufó e hizo muecas de hipocresía.–Te echo mucho de menos, y solo han pasado unos días desde que no nos vemos. En fin, por aquí las cosas están tranquilas, y... bueno... ¡No me gusta que estés sola allá en Seúl! Por favor hija cuando puedas escríbeme corazón, ¿Si? No olvides que tu familia te ama, muchos besos hija ¡Cuídate mucho!"
—¡Jac! Ella me da el mismo discurso siempre, todos los días me dice lo mismo –Bufó mordiendo una tostada mientras respondía a su madre con frialdad un simple ¡Hola! –Vamos, ¡A quien engaña! Si me amara tanto como dice, no se hubiese ido a Australia en las épocas de exámenes finales y así yo hubiese viajado con ellos, y si me extrañara tanto regresaría conmigo y no me dejaría a cargo de la servidumbre. ¡Si de verdad me quisieras no me hubiese dejado en Seúl sola para irte a Australia! –Dijo ella haciendo pucheros mientras le hablaba a la pantalla de su teléfono –Bah, ella ama más ese país que a su propia hija.
