🍵Especial 2🌸

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Un padre te lo da tu sangre, pero hay padres que escoges tú.

Era lunes catorce de junio y solo faltaban seis días para el día del padre

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Era lunes catorce de junio y solo faltaban seis días para el día del padre. Miya y su madre estaban en el centro de comercios, recorriendo tiendas de ropa, joyerías y tiendas de perfumería de importación, buscando el regalo perfecto para el señor Chinen.

- Miya, ¿Me estas escuchando? - lo interrogó su madre.

- Si, lo siento madre... - Miya estaba concentrado en ver su celular, ya que estaba arreglando de verse en ese mismo lugar, al día siguiente, con Reki y Langa.

- Entonces, ¿Qué opinas? - su madre esperaba que fuera el menor el que escogiera entre las distintas opciones que la mujer le había dado.

- Ehh... Creo que la camisa y el reloj estarán bien, madre - Miya no odiaba a su padre, tampoco a su madre, sabía que solo habían quedado cegados por el dinero, así que solo intentaría poner lo mejor de él.

- Bien, compremos la camisa y el reloj - la mujer sonrió y caminó hacia una de las tiendas que ya habían recorrido anteriormente, allí compraron una camisa blanca lisa que la mujer aseguraba le quedaría muy bien a su esposo. Luego fueron a una joyería que había en el lugar y compraron un bonito reloj de muñeca - Tu padre estará muy contento con esto - ambos salieron del centro de comercios, en dirección a un auto que los llevaría de regreso a casa, ya eran casi las seis y Miya debía terminar su tarea si planeaba escaparse a "S" esa noche.

(...)

- ¿Irás a ver a tu padre? - preguntó Kojiro al regresar de la cocina y despachar varios platos.

- Aún no lo sé... Digo, mi padre y yo siempre tuvimos buena relación, solo que era opacada por la forma de ser de mi madre - Kaoru jugaba distraídamente con los fideos en su plato - ¿Y tú? - levantó la mirada para ver al chef, este suspiró.

- Quizás recoja a mi madre por la mañana y vayamos al cementerio... Pero no lo sé, es una fecha difícil para ambos - Kaoru asintió y tomó una de las manos del moreno que descansaban sobre la barra.

- Sabes que me tienes contigo... Tú y tu madre, no están solos - sabía que para la familia de Kojiro, la muerte del señor Nanjo había sido un golpe muy duro.

- Lo sé, cariño, gracias... - murmuró con una pequeña sonrisa que le fue devuelta por el pelirrosa - Vayamos a ver a tu padre al regresar del cementerio, ¿Te parece bien? - sugirió aún manteniendo un bajo tono de voz y Kaoru asintió, regresando a su acción de comer al ver que una persona se acercaba a ellos.

(...)

- Madre... ¿Qué le regalas a un padre que no es tu padre? - preguntó Langa en medio de la cena con su madre.

Té verde y cerezas para Miya | Matchablossom FamilyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora