🍵Parte 7🌸

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Hiromi llevaba un largo rato conduciendo por el centro de Okinawa, recorriendo las calles más repletas de tiendas

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Hiromi llevaba un largo rato conduciendo por el centro de Okinawa, recorriendo las calles más repletas de tiendas. A su lado, en el asiento del copiloto, lo acompañaba un hombre de cabellos oscuros y expresión amable, una expresión muy distinta a la de preocupación que llevaba pintada en el rostro el pelinaranja.

— Hiromi — llamó el hombre con voz calma — ¿Sucede algo?, llevamos largo rato conduciendo... Y no es que me moleste, me agrada pasar rato contigo, pero pareces preocupado por algo — consultó el mayor, intentando encontrar en las facciones del menor o incluso en sus orbes, alguna respuesta a su pregunta.

— Lo siento si te preocupe... Es que Joe y Cherry serán padres dentro de poco y quería obsequiarles algo bonito para su futura hija — desde el momento en que supo de la futura llegada de una pequeña criatura a la vida de sus dos amigos, desde ese momento quiso encontrar algo bonito que obsequiarles.

— ¿Si sabes que si no te bajas del auto nunca podrás visitar las tiendas, verdad? — en el tono de voz del hombre mayor se podía distinguir una ligera burla detras de sus palabras. Hiromi bufo.

— Es que en treinta y cinco minutos no he logrado ubicar ninguna tienda de ropa para bebés o tiendas de artículos para niños — se quejó dando un golpecito con la palma de ambas manos sobre el cuero amarronado que revestia la estructura del volante.

— Ya, ya. Estaciona por aquí y vamos al centro de comercios, seguramente allí encontremos alguna tienda de artículos para bebés — sugirió su acompañante con una pequeña y dulce sonrisa, una que derritió por completo el noble corazón de Hiromi. Tal fue el impacto de aquella sonrisita dirigida hacia él, que necesitó un par de segundos para recomponerse, asentir ante su sugerencia y aparcar el auto en una zona permitida. Segundos después bajaron del automóvil y se dirigieron al centro de comercios — Es una niña, ¿Verdad?, ¿Qué planeabas comprarle? — consultó el hombre.

— Si — asintió junto a un suave movimiento de cabeza — Pensaba, en quizás, alguna prenda o algún producto. Langa y Reki iban a comprarle unos juguetes y una pijama, Miya dijo que le regalaría ropa... Y yo, aún no lo sé... — quería darle a sus amigos algo distinto a lo que los otros chicos iban a regalarles.

— Mmh... ¿Qué te parece algo para adornar su habitación?, también podrías comprarle una manta, nunca son suficientes cuando tienes a una criatura tan pequeña en la casa — opinó el muchacho. Hiromi asintió, era una buena idea.

— Gracias por venir conmigo... — murmuró, sintiéndose un poco patético al sentir como sus mejillas tomaban un caluroso carmín como si fuera una colegiala.

— No tienes porqué, me gusta aprovechar los momentos en que podemos estar juntos — sonrió para el menor, con un ligero rubor sobre sus pómulos.

Al final encontraron una gran tienda de artículos para bebés, niños y niñas. Hiromi se emocionó a tal punto que compró más de lo que sus manos podían cargar. Pero no podía con su emoción, esa pequeña criatura sería como una sobrina para él y quería mimarla todo lo posible.

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⏰ Última actualización: Sep 17, 2021 ⏰

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