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"Te traje un regalo."
Louis se negó a sorprenderse por la repentina voz cantarina que surgió a su lado. Le dio una mirada de reojo, aprovechando la sombra del árbol y el sol que se reflejaba tras ellos. No había nadie en ese campo y Louis agradecía tanto que los humanos no lo hubieran descubierto y acabado con todo. No es que le tuviera mucho aprecio al campo de flores, soleado y de cielo azul, él estaba acostumbrado a sitios oscuros y calientes, como la casa del Jefe. Oh, y las mazmorras. Ese tipo de cosas, su sitio y todo eso. En cambio, esto era... bonito. Lo más cercano al cielo.
"¿Qué?"
Harry tarareó, sin responder realmente y Louis volteó a mirarlo. Vestía de blanco, como siempre, y ahora sus muy largos rizos se encontraban sujetos por una cinta blanca. Si a Louis le gustaba, no lo diría, de todas formas.
"No es... oro o plata" comenzó diciendo la criatura, sus ojos deslizándose sobre el campo de flores. En algún momento, cuando se detuvo sobre Louis, el verde del ángel chocando contra el azul del demonio, sus mejillas adquirieron un tono rojizo. Humedeció sus labios, la piel tornándose dorada bajo los rayos del sol. "Es, en realidad, cobre. La hice yo mismo."
Louis alzó una de sus cejas, la curiosidad y conmoción danzando en su expresión.
"¿Qué es?"
Harry no respondió. En su lugar, de la túnica, extrajo algo. Luego, se lo extendió a Louis.
Era una tiara de laureles.
Y bueno, la realidad era que Louis nunca había recibido un regalo. Esas eran cosas de mortales. ¿Quién le iba a regalar algo a un demonio que era encargado de provocar el caos? No. Nadie. Ni siquiera cuando fue creado.
Y entonces, ahí estaba Harry. El pequeño ángel Harry, de facciones hermosas, de piel pálida y brillante, de cálida dulzura e inocencia. El ángel, quien le extendía una fina tiara de tono cobrizo, hecha con cuidado y casi con delicadeza. Hecha para él.
El ángel le sonreía al demonio.
"¿Esto...?"
"¿No te gusta?" le preguntó entonces, su voz encogida con un poco de desilusión. De repente, su mano retrocedió, alejándose. "Si no te gusta está bien. No hace nada. No te preocupes."
Entrecerró los ojos. Lo observó en silencio por un par de segundos.
"Me gusta."
Harry alzó los ojos, sorprendido.
"¿Qué?"
Louis se removió, un poco avergonzado e incómodo.
"Me gusta" declaró, como si fueran la mayor de las palabras. Los ojos de Harry resplandecieron entonces, el verde convirtiéndose en oro y sus alas apareciendo de repente, aleteando un poco, plumas blancas deslizándose alrededor de ellos. Louis amplió los ojos, impresionado. Luego, sacudió la cabeza, un poco demasiado cariño, pero no aceptándolo. "¿Harry?"
El ángel salió de esa esfera de luz en la que se había adentrado de repente, pestañeando y recobrando su expresión. El verde regresó, tan colorido y lleno de emociones buenas que Louis, inevitablemente, sonrió.
"Mi tiara. Entrégamela."
Harry dejó ir una risita.
Sus dedos sujetaron el aro por un extremo, extendiéndola con cuidado. Louis la sostuvo por el otro, sus dedos sin siquiera rozarse, ni un solo centímetro de sus pieles tocándose alguna vez.
Ellos no podían. Sus pieles, si hacían contacto, quemaban. La pureza en la sangre de Harry resultaba exterminante para Louis, y el fuego con el que el demonio había sido creado ardía en la piel del ángel. Ellos no podían tocarse, nunca.
Al menos no hasta que Harry fuera coronado arcángel.
Faltaban diez días para ello.
"¿No hay travesuras hoy?"
Louis negó.
"Estoy reservando un gran plan."
"¿Cual?"
"Una guerra" dijo con simpleza. Harry lo miró con curiosidad.
"¿Cuando?"
"Ya lo sabes" se encogió de hombros fingiendo aburrimiento. Miró sus uñas, soplando sobre el tatuaje en sus dedos "por ahí, finales de diciembre. El veinticuatro, tal vez."
"Bajaré a detenerte."
Louis miró a Harry. Fue, inevitablemente, dulce.
"Lo sé."
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I hope that you don't run from me » larry
Fanfic"Y bueno, la realidad era que Louis nunca había recibido un regalo. Esas eran cosas de mortales. ¿Quién le iba a regalar algo a un demonio que era encargado de provocar el caos? No. Nadie. Ni siquiera cuando fue creado. Y entonces, ahí estaba Harry...