El t1ran0 y su secretar1a guapa

Capítulo 94

"Hermano, quiero usar mi espada tan bien como mi hermano. Para hacer eso-"

"Bajate."

Cuando era niño, a Karon le gustaba Kahir. A los ojos de Karon, Kahir era la persona más genial del mundo.
No es de extrañar que Kahir, con siete años a más que Karon, fuera superior en todos los aspectos. 

Pero en los ojos de Karon, Kahir parecía un genio.

Los profesores que enseñaban a Karon solían hablar sobre el genio de Kahir.

"Su Majestad el Príncipe conoce el calor cuando le enseña a uno. Nuestra Majestad lo hará demasiado a la derecha?"

Sin embargo, sus expectativas se rompieron de vez en cuando. Karon no era tan inteligente como Kahir. Los nervios motores no eran tan buenos.

Intentó mucho, sin dormir. No porque quiera vencer a Kahir, sino porque quería estar a su lado.
Karon pensó que Kahir lo ignoró porque le faltaba conocimiento.

Quería cumplir con las expectativas de Azela y ser reconocido por Kahir. Pero falló en todo.

Azela admitió que era inteligencia lo que le faltaba Karonte.

Un día cuando vió a Karonte temblando frente a un profesor de filosofía que le dijoque leyera un libro en otro idioma que nunca había estudiado.

Azela golpéo muy mal a Caronte. Y al día siguiente, ella sonrió como si nada había sucedido, y trajo al maestro etheusiano.

Karonte no era incapaz de leer porque no sabía qué escribir. Karon sabía cómo leer y escribir cada letra. Simplemente no podía leer el libro. Entonces no podía estudiar.

Se esforzó al manejo de la espada. Por la esperanza de que si se parece a su padre,podría tener talento para el manejo de la espada. Desafortunadamente, sin embargo, no teníatalento para el manejo de la espada. Karonte era una persona inútil.

(N/t: Mi bebé no es inútil, solo no descubrió su talento)

Mientras Azela luchaba por encontrar el talento de Karonte, Kahir construyó sus tácticas en elcampo de batalla .

Kahir se convirtió en emperador. Azela envió apresuradamente Karonte al castillo de la provincia.

"Mi hijo, su mamá definitivamente tomará su lugar de vuelta".

Le aterrorizaron las palabras de Azela, agarrándole de la mano que se alejaba de Karonte yhacia la promesa.

Karonte nunca consideró el asiento del Emperador como su discípulo. No era mio desde el  principio, y como era un buen lugar que ya había encontrado al dueño, quería decir que no quería nada para recuperar. Pero no pudo decir que no a Azela... lo iba a matar.

Cuando murió su padre, los ojos de Azela estaban muy abiertos como si lo hubiera perdido todo.Esos ojos vacíos contenían la muerte.