CAPITULO 4

21.5K 1.3K 2.2K
                                    

Perdón por la tardanza, no tengo excusas, solo puedo decir que...XD, les traje un capítulo largo como recompensa.

Advertencia: +18 y mucho cringe.

***

—Kirishima...Kirishima... ¡¿ME ESTAS ESCUCHANDO PELO PINCHO?!

Kirishima salió de sus pensamientos al escuchar el grito de su pareja muy cerca de su oído. Maldijo internamente, a este paso lo iba a dejar sordo.

Los dos chicos se encontraban a la mitad de una partida de Leage of Legends con toda la Bakusquad, cuando el pelirrojo había dejado de reaccionar y se quedó viendo pensativo la pantalla.

—S-si Bakugou, ¿Qué decías? Perdón—se disculpó.

—¿Qué te sucede hoy? desde que llegaste de hacer ese estúpido trabajo has estado actuando más idiota de lo normal, y eso es decir mucho.

El pelirrojo frunció las cejas, intentando utilizar toda su capacidad cerebral para pensar en una excusa inteligente que lo respaldara y que cubriera la horrible verdad, no necesitaba decirle al rubio lo que había descubierto, sería como una sentencia de muerte, no solo para sus nada masculinos compañeros sino también para él, por ser tan descuidado.

—Nada Kat, solo estaba pensando en algunas cosas. Nada importante—Bakugou lo miro extrañado y comenzó a acercarse a él lentamente, Kirishima se puso nervioso al ver la forma felina en la que se arrastraba sobre las sábanas.

—¿En qué pensabas, exactamente? Mhn...Kirishima—susurró cerca del cuello del pelirrojo colocando sus piernas a los costados de su cadera—¿pensabas en mí...quieres follarme?

Los colores subieron de inmediato por el rostro estupefacto de Kirishima, su cerebro no acababa de procesar la frase, aunque al parecer su polla sí que la entendió perfectamente, endureciéndose en tiempo récord.

Colocó sus manos en la cintura de Bakugou, frenando su intención de beso.

—¿Q-qué? Bakugou espera—no era momento para fornicar, era momento de pensar en una solución para lo que había sucedido con Midoriya y Mineta. Kirishima no podía hacer las dos cosas al mismo tiempo, eso era imposible para un ser mononeuronal como él.

Bakugou lo ignoró, como siempre, y empezó a restregar su trasero contra el pene super duro de Kirishima.

—Vaya...si que estabas desesperado ¿eh? Pelo de mierda—se burló de la condición del contrario, que no podía hacer más que jadear. El rubio soltó una risita excitada—¿extrañabas restregarte contra mí? Maldito simio.

Kirishima mentiría si dijera que no lo estaba disfrutándolo, su lado hormonal haciéndole frente a su lado racional, tratando de tomar el control de su cuerpo. El chico cerró los ojos intentando poner sus ideas claras, pero lo único que logró es que Bakugou continuara burlándose de él, moliéndose mas fuerte contra su entrepierna.

—No te avergüences...es normal estar así de caliente después de tanto tiempo sin coger—Bakugou estaba jadeando y sus mejillas estaban prendidas en un rojo suave. Kirishima colocó una mano en su rostro, cautivado. Su novio era realmente hermoso.

Bakugou le regalo una sonrisa sincera que hizo que el corazón de Kirishima se derritiera, atrapándolos en una burbuja azucarada antes de que el rubio decidiera romperla, tratando desesperadamente de bajar los pantalones del pijama con dibujitos de Crimson Riot.

—B-bakugou ¿estás seguro? Ya es tarde y mañana tenemos clases temprano—el chico rubio lo ignoró, logrando entre forcejeos bajar lo suficiente el pijama como para dejar el miembro del pelirrojo expuesto ante sus ojos, Bakugou se relamió ante la vista y su mano lo tocó ligeramente, haciendo jadear Kirishima.

Nunca Veas Dentro [kiribaku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora