Una semana

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El lunes pasó y me encontraba bastante cansada, así que me dirigí al despacho de Dumbledore, al llegar a la puerta, dije la contraseña y subí la escalera.

-Buenas noches Señorita-dijo con una sonrisa-¿Que desea a esta hora?-

-Quería decirle que quiero tomarme una semana, no me encuentro con fuerzas-dije con una débil sonrisa-

-Señorita, ¿esta bien?-pregunto procupado-

Asentí y el suavizo su expresión de preocupación.

-Esta bien, tómese el tiempo necesario, eso sí necesito que mañana venga a dar clase-

Asentí y al salir de ese despacho, su voz me frenó.

-¿De verdad se encuentra bien?-

Volví a asentir.

-Solo estoy sin fuerzas, es todo-

Asintió y salí del despacho, me encamine a la puerta principal, pero antes de llegar.

-Tam, ¿Ya te vas?-

Me gire y me encontré con Severus.

-Si-respondí simplemente-

-Tesoro, ¿estas bien?-

Asentí, pero antes de salir me tomo del brazo y me abrazo.

-Te quiero, lo sabes ¿no?-susurro-

Asentí con los ojos vidriosos y salí del colegio para aparecerme en mi apartamento.

Al dia siguiente fui a dar mis clases con normalidad y después de la comida Dumbledore me llamo a su despacho.

-¿Quería verme?-pregunte al sentarme en la silla-

Asintió y sonrió levemente.

-Si, a partir de mañana ya no tiene que venir-dijo mirándome a los ojos-Tómese el tiempo necesario-

-Muchas gracias director-dije-

-Señorita antes de que se vaya-comenzó-¿Severus lo sabe?-

Negue lentamente y salí del despacho.

Termine mis clases del dia y después me aparecí en mi apartamento.

Varios días después...

Pase las noches en vela y el cansancio no cesaba, no supe nada de Severus, ni él de mi, hasta que aquella mañana al bajar a desayunar me encontré con una carta.

-No se si quiero que venga-pensé-

No le respondí y con el pasar del dia, por la tarde sonó el timbre del apartamento.

-¿Quien será?-pensé-Dora y Remus tienen una misión de la orden-

Me acerque a la puerta y la abrí, cuando la puerta estuvo semiabierta, me abrazo, me sentía incomoda con su abrazo.

-¿Que haces aquí?-pregunte aun envuelta en sus brazos-

Nos separamos y me sonrió levemente.

-No sabia nada de ti, estaba preocupado-

-Severus estoy bien-respondí simplemente-

Le deje espacio para que pudiera pasar y nos sentamos en la sala.

-Estas muy rara, ¿te pasa algo?-pregunto preocupado-

Negue lentamente.

-Estoy algo cansada y sin fuerza simplemente-

Me miro a los ojos y yo baje la vista algo incomoda.

-Tesoro, no tienes que mentirme-comenzó tomándome de la mano-¿Enserio solo es eso?-

Asentí y le intente sonreír.

-Ahora por favor,¿ te puedes ir?-

Me miro confundido.

-Quiero estar sola-

Asintió y se fue.

Los días restantes pasaron y me encontraba algo mejor, así que regrese al colegio.

One Shots ~Severus and I~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora