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Reloj

Mi lord, ya acordaron el pacto, el depósito de sangre se agotó. El ataúd se abrió dejando ver una criatura con ojos rojos y dientes afilados, las garras se pasearon por la herramienta de metal dando apertura a un ruido estremecedor. En posición supina levita cayendo de pie ante la verdosa figura enana, tomándola por el cuello, dijo. Jake ¿y qué hiciste para resolverlo?

Yyooos, yoo. Tartamudeó, ¡amo bonito! Yo” se retorcía de miedo, más fue soltado en suelo sin ceremonia.
 ¡Auh! Se quejó el feo vasallo de ojos saltones, hocico ancho y puntiagudo.

Jake.

"Dígame señor" inclinó la cabeza.

"3 semanas, ni más ni menos o pagarán bien caro"  Amenazó a los súbditos "Ahora. Cada minuto vale" Sufriendo una metamorfosis salió a la caza.

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¿Eh? Siseó divertida kikyou ocultó la sonrisa al recibir la mirada desaprobación en la mesa.

Tu madre escapó de él por culpa de tu padre, un vil campesino, rechazó la inmortalidad kikyou, fue así cuándo naciste.

¿Y?

¿Y? Niña entiende que es por tu bien, vendrán a tu encuentro en unos días. 

Kagome.

Ordené al padre. 

Entregarle tu vestido viejo a kikyou. Dijo Naraku, pueden ir con la institutriz.

Como diga.

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El antiguo inmueble polvoriento poseía un llamativo particular nada menos que los desnutridos árboles sollozando junto a lo aullido del lobo con el inusual sonido del viento frío arrastrando presagios y males penosos, tragó saliva evitando tocar kikyou.

Transcurrieron tres auroras, no obstante hoy temprano justamente en la apertura del sol. Kikyou y su prima elegían vestidos coloridos “te gusta esté azul kikyou”.

Kikyou tembló ante la corriente de vigilia y alerta, un clímax desfavorecido, tenía un mal presentimiento en todo alrededor.

Anna, Victoria, Kaede, déjennos solas, a mí, a la hermosa kikyou, retírese. Las esclavas captaron él mandató sin rechistar.

Kikyou entrecerró y entrecerró los ojitos pensando que estupidez haría kagome, muy astuta no es; Un veneno dulce; zalamería, hostilidad amable, sonriente aduladora e hipócrita, resbuco los peores vestidos buscando menguar la hermosura de kikyou.

 ya que no había nadie cerca, mostró su odio y envidia, incoherencia salió de kagome malintencionadas. "Nosotros te venderemos a un demonio chupa sangre, Vampiro"

Poquito le faltó para no estallar de la risa, kikyou bisbiseó, "oh por dios vampiros".

Sí, y Chuparán tu sangre, y comerán tu fea cara, tienes suerte de no conocer tu rostro..

kikyou tocó su cara con tristeza, ¿esa es la razón de mi cautiverio? Pensó melancólica.

Feo, viejo muy anciano, libido, lujurioso te tortura de mil maneras. La chica respiró con asco a la descripción.

"El Lazo de Sangre bajo la Luna" (modificación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora