| 𝐀 | 𝐄𝐝𝐰𝐚𝐫𝐝 𝐂𝐮𝐥𝐥𝐞𝐧 𝐟𝐚𝐧𝐟𝐢𝐜𝐭𝐢𝐨𝐧
INTO YOU | ❝Ashly llega a Forks intentando despejarse de todo, creyendo que tendría una vida tranquila. Cuan equivocaba que estaba
Edward Cullen, un vampiro que aún no encuentra a su tua cantan...
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—¡Dije que me dejes en paz!—le grité a Edward cuando entré a casa de Charlie.
—Ashby, no hagas esto por favor.—pidió.
—¡Se acabó! ¡Vete!—subí las escaleras.
—Oye, oye, oye, oye. Ashly ¿Qué te pasa?—paró Charlie siguiéndome.
—Tengo que irme, ya me voy.—le cerré la puerta a Charlie en la cara.
Edward ya estaba ahí, poniendo mi ropa en una maleta, el plan era fingir que peleamos y luego yo irme con él a su casa para que con su familia hagamos otro plan.
—¿Aly?—preguntó Charlie desde el otro lado de la puerta.
—¿Qué le voy a decir? No quiero herirlo.
—¿Ashly que está pasando?
—Tendrás que hacerlo. Estaré en la camioneta.—me dijo Edward saltando por la ventana.
Salí del cuarto y Charlie no se había movido.
—Oye ¿Te hizo daño?—preguntó preocupado.
—No.—negué agarrando unas cosas.
—¿Terminó contigo o algo así?
—No, terminé con él.—mentí, eso se me daba bien para escapar de preguntas.
—Creí que te gustaba.—volví a salir que mi cuarto antes de contestarle.
—Sí, por eso tengo que irme, no quiero esto, iré con mi tía Lyra.
—¿Tu tía Lyra?
—Sí, tengo un cuarto y una cama al lado de la de Lynette.
—Es muy tarde para que te vayas ahora, tienes que pensarlo. Si todavía quieres irte en la mañana, yo te llevo.
—No, quiero ir en auto, me dará más tiempo de pensar. Si me canso me quedaré en un hotel, te lo prometo.
Bajé las escaleras sintiendo a Charlie tras mío.
—Ashly sé que no es divertido estar conmigo pero, puedo cambiar eso, podríamos hacer más cosas juntos.
—¿Cómo qué? ¿Estar sola siempre? ¿Verme casi nunca? ¿Ver beisbol? ¿Todos los jueves comer carne y postre? Eso es lo que hacen mis padres y los dos últimos son lo tuyo—me sentía terrible porque sabía que le estaba haciendo daño a Charlie.
Isabella, o Bella como le gustaba que la llamasen, no iba a volver, y yo prácticamente le estaba rompiendo el corazón al hombre que consideraba un padre.
—Por favor Aly, te acabo de recuperar.
—Sabes que si no me voy ahora, me quedaré estancada en el trabajo como mis padres, lo único que me interesará será trabajar.—cerré la puerta y caminé a mi auto.