DREAMIN'ON - Watching One Piece

LA NAVEGANTE DEL REY DE LOS PIRATAS - LA GATA LADRONA NAMI

Muchos en la sala se encontraban emocionados por ver al siguiente integrante.

Solo llevaban dos personas y ya habían logrado que las apuestas se dispararan, ¿Quién sería el futuro Rey de los Piratas? ¿Quién sería el responsable de guiar a esa nueva tripulación?

A otros realmente no les importaba, pero sabían que por algo habían aparecido en esa sala junto a los demás. Para bien o para mal, ellos se habían cruzado en el camino del futuro Rey Pirata.

Algo ya había quedado claro para muchos, el futuro Rey de los Piratas no era Charlotte Linlin. Y, por lo que iban viendo, parecía que ninguno de los Yonkou existentes sería el destinado a ser el Rey de los Piratas.

El destino es cambiante, no hay nada escrito, se decían algunos.

Y era cierto, no hay nada escrito en esta vida. El mundo está lleno de probabilidades. Pero, lo que ellos parecían olvidar, es que al futuro Rey de los Piratas le valía mierda el jodido destino.

Esperemos que pronto lo entiendan. Solo habría un futuro Rey de los Piratas y ese, era capaz de romper todas las leyes de la lógica para alcanzar sus objetivos.

Mientras tanto, dicho futuro Rey de los Piratas se encontraba hurgándose la nariz, exento de lo que pensaran los demás.

Las emociones dentro de la sala eran diversas, pero en su mayor parte reinaba la curiosidad.

Los marines hacían planes para capturar al futuro Rey y su tripulación aún en formación. Cuando salieran de aquí, obviamente.

Los revolucionarios miraban atentamente todo lo mostrado, aún no entendían su importancia en esta sala. Si, el futuro Rey sería un aliado ¿qué tan involucrados se encontraban ellos con él?

He de decir que se estaban divirtiendo con la perspectiva de ver como la futura tripulación le daban dolor de cabeza a los marines.

Los aldeanos tenían distintas ideas. Algunos estaban a favor de los piratas, otros no. A algunos ni siquiera les importaba, ganar es ganar, dinero es dinero.

Los habitantes de la villa de Cocoyashi en particular, se encontraban preocupados. A la chica a la que habían visto crecer, para luego ser esclavizada por piratas, le estaba pasando algo.

Todos ellos sabían la verdadera razón por la que Nami trabajaba para los piratas de Arlong, los piratas que se habían apoderado de toda su villa.

Habían fingido guardarle odio y rencor, solo para que no se preocupara más. El peso que cargaba sobre sus hombros era bastante grande. No querían que se la pasara preocupándose por ellos más de lo que ya lo hacía.

Genzo miraba a Nami, esperando que lo que sea que la atormentara se fuera. Extrañaba los días en donde todo era un poco más sencillo. Los días en los que Bellemere aún estaba junto a ellos.

Nojiko observaba a Nami y sabía que ella lo sabía, pero no decía nada para pedirle que pare. Nami se había quedado bastante callada, más de lo usual.

Ella miraba fijamente la pantalla con ojos confundidos y llenos de incertidumbre, como si no supiese que esperar.

Fue ahí, cuando Nojiko comprendió la situación mientras abría los ojos sorprendida. Podría ser...

La pantalla se encendió. Esta muestra a la figura borrosa de una chica pelinaranja. La imagen se aclaró un poco en la parte inferior, para mostrar los labios de la chica mientras sonreía con nostalgia al ver un viejo mapa.

"Tardé 8 años... Mi sueño, mi villa, al fin mi gente y yo somos libres"

La pantalla vuelve a oscurecerse.