Kibō es un joven que normalmente se mete en problemas por luchar por injusticias. Él ya tiene 18 años y no sabe a que dedicarse, hasta dichos acontecimientos que lo harán abrir los ojos y querer luchar por la paz mundial. Estamos en 2021, pero en es...
—Tengo hambreeeee... —dijo Kibō con cara de cansancio.
—Aggggg, a comer huevo otra vez —dijo Isao, molesto.
—Como odio esto... —se quejó Kibō.
—Chicos, ¿Qué les pasa? La vez pasada pensaron que ustedes estaban atracando a una anciana, ¿Ahora agreden a personas en una tienda de camarones? —preguntó Akiro, burlándose—. ¡Ahora son criminales buscados!
Akiro, un amigo de Kibō e Isao. Es muy inteligente, él creó la flauta que dispara de Isao.
—¿Cómo lo supiste? ¿Acaso estuviste con nosotros? —preguntó Kibō, sorprendido.
—¿Tan mala memoria tienes? Yo siempre estuve en casa, solo lo vi en las noticias —respondió Akiro.
—Oh... ¡Ahora todo tiene sentido! Ja, Ja, Ja
—Oye Akiro, ¿qué haces? —preguntó Kibō, mientras apunta a lo que Akiro está haciendo.
—Oh, ¿esto? Estoy creando un "nunchaku", que al darle a este botón gira automáticamente a una velocidad muy rápida, yo creo que podría decapitar a alguien fácilmente, ¡mira!
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—Pero... ¿es normal que esté a punto de desprenderse? —preguntó Kibō.
El nunchaku sale disparado rápidamente por la ventana debido a la rotación rápida.
—Mierda, otra vez... Aún no está listo, tengo que hacer algunos arreglos y ya —dijo Akiro, sonriendo.
—Bueno... ¡saldré afuera, al rato regres-! —dijo Kibō, tranquilamente.
—¡¿A DÓNDE VAS MALDITO IMBÉCIL?! —preguntó Isao, MUY enojado.
—Afuera, ¿por? —respondió Kibō un poco confundido.
—No sé lo que pasó... pero seguramente todavía están tras nosotros... —dijo Isao, seriamente con los brazos cruzados.
Personas que pensaron que Kibō e Isao eran los malos cuando obviamente todo era al revés. Un policía capaz de correr más rápido que un coche. Que de repente les dejaran de perseguir... La policía ahora va trás Kibō e Isao... Muchas preguntas sin resolver...
