MI PRIMO Y SUS JUEGOS ||C.V.|| TERMINADA

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Ya en mi departamento, hago lo de siempre, pero oh sorpresa en la mesa del comedor hay un plato de comida tapado, encima hay una nota con el tipo de letra que se reconocer muy bien, Zabdiel.

«Pase temprano con la esperanza de verte, no te encontré, pero si te dejé alimento, come y descansa. Te amo, cariño»

Él puede ser un buen novio cuando quiere no lo puedo negar, pero ¿Por qué no me espero? Con esa pregunta me dispongo a comerme mientras escucho un poco de música en Spotify.

Luego, voy directo a empacar ¿Qué debería llevar? después de todo solo será una semana ¿Verdad? pero como siempre ando con la peor suerte del mundo, prefiero ser precavida y empacar más de lo necesario.

Cuando terminó dejó la maleta a un lado y me acuesto en mi camita, no sin antes tomar mi teléfono y revisar si tengo algún mensaje pendiente. Sin embargo, con lo único que me encuentro es con las llamadas perdidas de mi madre, no es muy tarde y decidí devolverle la llamada:

Hannah, ¿al fin recuerdas que tienes una madre?

Instintivamente me siento culpable, porque ella tiene razón, y ahora comprendo cuando dicen que las madres siempre tienen razón:

Lo siento mucho, mamita —digo con voz dulzona— Pero ya sabes el trabajo siempre me mantiene ocupada

Pues déjame decirte que hablar con tu madre no te quitara más de 10 minutos —me reprende y sin querer me siento regañada— Dime ¿Ya tienes todo listo para mañana?

Sí mamá, ya tengo todo listo. Mañana me tendrán por allá —le aseguro a la mujer que me dio la vida

Perfecto mi cielo —dice— Tu abuela está muy ilusionada con la sola idea de verte.

Yo también quiero verla. Los he extrañado a todos.

¿Ah sí? —y ahí vamos de nuevo— Pues déjame decirte que es rara tu forma de extrañarnos

Suspiro pesadamente y sonrió inocentemente:

Deja de poner carita de niña inocente porque sabes que lo digo en serio —Pero ¿qué...? —Te conozco como la palma de mi mano, no por nada te llevé nueve meses en mi vientre para después crearme niña

Lo sé muy bien mamá y sabes que te amo.

Deberías demostrarlo más a menudo, cielo —me reprocha

Está bien mamá —volteo los ojos— Tengo que dejarte, iré a descansar para mañana.

De acuerdo cielo —y cuando creo que va a colgar vuelve a perturbarme— Lo olvidaba, mañana tu primo Chris ira por ti al aeropuerto, porque yo no podré cielito, estoy a cargo de preparar la comida

¿Ah? ¿Qué acaba de decir mi madre?

¿Christopher está con ustedes? —no puedo evitar preguntar con desconcierto

Si cielo, hace un par de días llegó y está más que emocionado por verte —dice eufórica mi querida madre— Bueno ya vete a dormir niña, sino mañana perderás el vuelo cielo

Un suspiro me abandona

Está bien mamá, hasta luego.

Después de colgar, hago mi berrinche porque siento que no estoy lista para ver a mi primo, no después de lo que pasó esa tarde y con la llamada.

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En la mañana siguiente y después de haberme alistado a la misma velocidad de la luz, salgo directo al aeropuerto, hago todo el proceso de abordar hasta que es hora de subir al avión.