Guerra de Gigantes:Ascenso de La Republica Galactica de Francia.

Ayudante

Pobre Francia, pobre de sus hijos, la noche se pone sobre ellos, pero sobre quienes, los hijos que hoy habitan en sus calles mientras mueren de hambre y el infortunio es el dia a dia de sus terribles existencias.

O es acaso el infortunio el que lentamente como la sombra que se expande mientras los rayos del sol se mecen en la lejanía, sus pasos mas y mas se iban fluyendo a los hijos favoritos de Francia.

En el caso de esta ayudante, sin rango, sin un pasado, sin apellido, de un hombre común, nada de eso importaba, solo sabia que anhelaba el sobrevivir.

Con su belleza exquisita desde la mas tierna edad logro estar al servicio de los nobles, con unos mas petulantes o crueles que otros, todos de ellos avariciosos y que no veian mas igual que otros seres con grandes casas, grandes genealogías y sus espiritus petulantes que despreciaban a todo como indigno y patético.

Su vida se paso entre ser llamada muchacha, sirvienta, ayudante, put*, perr*. Amante o un objeto en el fondo dependiendo del poderoso señor o señora donde estuviera.

Y esa idea nunca se la saco de su cabeza, solo era una mas entre millones de plebeyos que se agazapaban para poder gozar de unas pocas migajas.

Vivir en Francia no era tan glamoroso y de envidia como muchos pensarían, era la idea que había surgido de la Corte del Rey Sol, aquel magnifico Dios-rey que había elevado a Francia en el poder máximo de Europa, la poderosa Inglaterra con sus flotas no tenia su riqueza, Austria con sus ejércitos no se comparaba en el arte militar, los reinos italianos a un paso de ser franceses, el reino Prusiano entre la fuerza de Francia, de Rusia y de su enemiga Austria, y esa Rusia tan grande y sin fuerza para poder moverse en guerra contra otras naciones debido a su tamaño.

Y asi cada año, miles de hombres, mujeres, eran sacrificados por la gloria del Reino Frances, ya fuera en sus fabricas, en sus campos, en cada nave o cada pequeño recinto, todo se concentraban en dar gloria y poder a esos hombres y mujeres que su única bendición fue el ser hijo de un individuo que contenia demasiados títulos para poder recitarlos.

Un escandalo exploto en todo el Reino, se sabia que Francia contenia en su seno a una de las mega poblaciones mas masivas en el universo, se salieron documentos de una atrocidad que se exparcio por todos lados.

No solo la incompetencia de los reyes y que todos esos nobles y aristócratas oprimieran el pueblo, se descubrió que desde años los nobles habian entregado comida modificada a la población para hacerla muy fertil, provocando una cantidad masiva de gente en cada metro de los planetas.

Pero no fue para aumentar la tasa de vida, sino porque los nobles franceses usaban fabricas para diseccionar, y luego extraer los ADN de miles de personas antes de ir creando una de las grandes industrias francesas.

Y esa la creación de los tratamientos genéticos.

Para hacer esos productos que iban desde simples bebidas hasta capsulas con sus diferentes tratamientos, usaban la vida de miles de franceses para procesarlos y luego usar sus secuencias genéticas en esos tratamientos exclusivos para sus ventas a otras naciones.

Por ese motivo cada año desaparecían miles de personas en todos los planetas, porque eran puestos en esas fabricas donde tenían muertes lentas y dolorosas, mientras les extraían órganos y se iba purificando los tratamientos finales.

Fue un acto caníbal, un terrible Neo-canibalismo genético.

Las ciudades y poblaciones se rebelaron y las ideas de libertad, igualdad se esparcían, mientras la policía desaparecia a miles que no volvían a hacer aparición, pero cuando caia 1 se levantaban 10.

Juliana tuvo un golpe de suerte mientras que cientos de plebeyos renunciaban a sus trabajos y otros mas entraban en huelga, entro al serivicio de una hermosa anciana de 70 años, a pesar de que la vida se podría expandir por cientos de años, la mujer se negó a recibir tratamientos de alargamiento de edad, fue de las primeras en descubrir los negocios familiares, al final solo le quedo aceptar esa crueldad en Francia y se alejo de su familia