seis.

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JungWon caminaba por los pasillos de la universidad, después de ese día ninguno de los ocho había vuelto a hablar del tema. Era recreo y no quería ir al patio por lo que estaba paseando por ahí a pesar de que sabía que sus amigos lo estarían buscando.

Se adentró al baño para lavarse las manos que estaban un poco sudadas, cogió un poco de papel para secarse y cuando iba a salir sintió como alguien lo empujaba y lo metía de nuevo.

Abrió los ojos —ya que los había cerrado al chocar contra el lavado—, y vio a su compañero de habitación cerrando con seguro la puerta.

—¿¡Qué te pasa!? —reclamó.

—Te estaban siguiendo —habló mirándolo seriamente—. Caminaba por aquí y vi como alguien te seguía.

—¿Y no crees que podría sospechar que sabes quién es esa persona si me mantienes aquí encerrado?

—No, porque en tres minutos acaba el recreo y entre los estudiantes nos vamos a dividir.

JungWon se quedó callado y miró como el mayor miraba su reloj en la mano.

—¿Tienes tu celular? —preguntó.

JungWon negó—. No los quitaron ayer en la noche.

—Cierto, lo había olvidado.

Se quedaron en silencio nuevamente, sin saber que hacer o que decir.

—¿Cómo llegaste tener un reloj sin que se den cuenta?

—Tengo mis contactos.

—¿Cómo?

—¿No ves que nos dan por unos días los celulares? —JungWon asintió—. Le escribí a alguien que me lo traiga.

—¿Y cómo hizo?

—Preguntas mucho niño -miró el reloj nuevamente—. Faltan 20 segundos, ve con SuNoo ¿Si? Y no te separes de tus amigos, no siempre voy a estar para que te cuide.

JungWon rodó los ojos—. No te creas mucho Lee.

El mayor rio levemente—: Y cierto, hoy habrá reunión con los chicos en el cuarto ¿Te puedes ir donde uno de tus amigos?

—Sí, no te preocupes ¿Tengo que estar antes de las nueve?

—Sí, ya esa hora no habrá nadie —JungWon asiente, justo toca la campana—. Adiós JungWon.

El mayor salió primero y soltó un suspiro para luego contar mentalmente hasta tres y salir.

Como había dicho HeeSeung, el pasillo estaba lleno por lo que muy fácilmente puede esconderse con los estudiantes hasta llegar con sus amigos.

—¡Hey JungWon! ¿Dónde estabas? ;preguntó SuNoo.

—Estaba en el baño, ¿Nos vamos a la siguiente clase? —SuNoo asintió y entrelazo su brazo con el de él—. SuNoo, tengo que contarte algo.

—Te escucho —sonrió.

—Iré a tu habitación hoy día ya que sus compañeros de cuarto se irán al mío porque tendrán una reunión.

—Claro, entonces al final de las clases vamos al salón de Jake y Gyu para irnos juntos.

JungWon asintió algo en su mundo y se dejó guiar por el mayor.

Tenía que advertirles...

Tenía que advertirles

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