Para ser tuyo

Mi casa es tu casa

"Aquí estamos. ¡Bienvenido a mi humilde hogar! Mi casa es tu casa y todo eso". Kara dice tan pronto como entran a su apartamento.

"Un segundo estás deprimida y luego estás feliz de nuevo." Lena murmura en voz baja mientras entra y mira cada centímetro del apartamento. Su atención se detiene en el estante cerca de la televisión y observa fotos de Kara con sus amigos y luego, como una revelación se percata de su propio rostro en ellas. Una foto de Lena y Kara sonriendo a la cámara. Se acerca al sitio y alzando la fotografía, se analiza así misma. "¿Ella sabe que nuestras madres están tramando algo?"

"Intenté decírselo para que tomara precauciones por su propia seguridad, pero ya la conoces. Ella no se lo tomó en serio. Probablemente actúe como si nada esté ocurriendo. ¿Quieres agua?" Kara pregunta.

"¿Sabe esta Lena que estoy aquí?" Pregunta, sus ojos todavía pegados a la imagen.

"Oh, um no. No tuve exactamente la oportunidad para decírselo". Kara sale de la cocina con dos tazas de agua. Lena baja la foto, ignorando la oferta de agua de Kara. Se queda mirando la foto una vez más y se da la vuelta para mirar a Kara.

"Dejemos algunas cosas claras durante nuestra asociación, ¿de acuerdo?" Lena dice estoica.

"Uh, ¿de acuerdo?" Kara responde insegura de lo que Lena quiere hablar.

"No somos amigos ni lo seremos nunca." Kara casi se atraganta con el aire cuando la escucha decir eso. Los recuerdos de cuando Lena le había dicho casi exactamente lo mismo hace un par de semanas nublaron su mente.

"Estoy retrasando mis planes de matarte hasta que mi madre ya no sea una amenaza. Estoy de acuerdo en quedarme aquí porque quedarme en el DEO es bastante sofocante y tú y tus amigos probablemente no confiarán en mí si estoy fuera de su vista la mayor parte del tiempo. Entonces, no me confundas con esa Lena. Puede que parezcamos la misma persona, pero no lo somos". Señala la imagen en el estante.

"Oh, no tienes que preocuparte por eso". Dice Kara en voz tan baja que Lena casi no podría oírla si no fuera por su mejor audición. Kara mira la taza en su regazo y juguetea con ella.

"Bien. Ahora, tú tomarás el sofá y yo tomaré la cama". Dice Lena y camina hacia el dormitorio.

"Wow, no hacia falta tanta agresividad. Iba a ofrecer eso de todos modos. A diferencia de alguien, yo tengo modales". Kara murmura mientras mira a Lena, que ahora la ignora. Kara se pone de pie y la sigue hasta el dormitorio, inclinando su hombro en el costado de la puerta. Lena estaba mirando alrededor del dormitorio y cuando sus ojos se posan en Kara, levanta la ceja izquierda en interrogación.

"Por mucho que me atraigan las mujeres, no me acuesto con mis enemigos. En caso de que te tomaras en serio el comentario que hice antes, fui yo quien estaba siendo sarcástica. Ella dice y Kara pone los ojos en blanco. "Honestamente, kryptoniana..."

"Ja, ja, muy graciosa". Responde Kara con voz muerta.

"Gracias, años de depresión simplemente te hacen enmascarar todo con humor". Dice Lena con bastante seriedad y Kara resopla ante el 'gracias' que Lena había dicho, pero cuando la expresión facial de Lena permanece estoica, se aclara la garganta.

"Eh, hay ropa cómoda en el segundo cajón y el inodoro está a la vuelta del pasillo. Hay un cepillo de dientes extra en el mostrador. Mañana Alex vendrá aquí con un montón de cosas para que nuestra misión sea más fácil". Explica Kara rascando su cabeza.

"¿Qué tipo de cosas?" Pregunta Lena mientras revisa el cajón en busca de una muda de ropa.

"Teléfono, inductor de imagen, dispositivo de rastreo, una nueva identidad para ti y otras cosas interesantes, supongo. Sabremos más mañana". Lena se enfrenta a Kara y su rostro muestra curiosidad, por lo que Kara levanta la cabeza y le indica a Lena que hable.