Para ser tuyo

Puedo esperar

Los ojos de Kara casi se salen de la cuenca del ojo cuando se dio cuenta de quién era la persona detrás de la puerta y comprobarlo con su visión de rayos X. Miró a Lena con pánico.

"¡Joder! ¡Joder! ¡Tienes que esconderte, pero ya!", Kara salta del sofá y prácticamente empuja a la confundida mujer a su dormitorio.

"¡Oye! Deja de empujar...", Kara jura que si Lena pudiera disparar láser con los ojos, ya estaría muerta. Las manos de Kara están ahora en la boca de Lena indicándole que se calle y Lena está disparando dagas con los ojos al super.

"¡Es Lena! Ella está ahí fuera", susurra Kara en voz alta.

"Di que estás ocupada o algo", susurra Lena.

"¡No puedo hacer eso! ¡es Lena!", Lena pone los ojos en blanco.

"Jesús, joder, ¿y por qué no?"

Kara pasa su mano por su cabello y su hombro cae un poco.

"Porque es Lena, ¿está bien?"

"Yo se quien es ella. Por el amor de Dios...  ¿Sabes qué? Yo me encargaré", Lena estaba a punto de pasar por delante de Kara cuando Kara la agarra del brazo.

"¡¿ahora que?!", ella siseó.

"Mira, déjame manejarlo ¿bien?, déjame ver lo que quiere, quédate aquí, por favor", ella suplica y usa su supervelocidad para limpiar el desorden en la sala de estar. En su prisa, no se dio cuenta de que había perdido un par de ropa y cierra la puerta del dormitorio dejando a la mujer confundida y enojada allí sola.

Kara reza en silencio para que se quede quieta y callada. Se acerca a la puerta principal y tan pronto como la abre, casi no puede respirar.

"¡Lena! ¡Oye! ¿Qué estás haciendo aquí? Quiero decir, ¡no es como si no te quisiera aquí! En todo caso, me alegro de que estés aquí y yo..." Kara se interrumpe nada más se percata que Lena tiene una caja en la mano. 

"¿Puedo entrar?", Lena pregunta y Kara murmura un 'sí' antes de hacerse a un lado para dejarla entrar. Lena entra y pone la caja en la parte superior del mostrador cuando nota dos tazas en el fregadero y la basura del lugar favorito para comer de Kara. Lena inclina un poco la cabeza hacia un lado y Kara sabe que está pensando en algo.

"Estas son las cosas que dejaste en mi apartamento", Lena dice mientras empuja la caja.

Si el aire que las rodeaba no fuera tan incómodo, Kara está segura de que se habría reído de cómo sonaba. Sonaba como si fueran pareja después de una ruptura. Ella asiente y se inclina hacia la puerta con las dos manos escondidas detrás de ella.

"¿Entonces estás aquí para darme mis cosas a la 1 am?", Kara pregunta con escepticismo.

"No podía dormir y tener tus cosas ahí solo... me distraían ", dice Lena y sus ojos permanecen en la caja que contiene ropa de Kara, libros que había dejado, así como su manta y un par de cosas más.

Ambas estaban congeladas en sus lugares, ambos sin decir una palabra hasta que escucharon algo caer en la habitación de Kara. La rubia respiró hondo y entró en pánico mental, temerosa de que Lena se diera cuenta de que había alguien más ahí con ellas.

"... ¿Hay alguien aquí?", pregunta Lena mirando directamente al alma de Kara y ella se encoge un poco sintiendo como si la hubieran sorprendido haciendo algo malo.

"¿Qué-", Kara camina hacia la cocina y se encuentra junto a Lena.

"Hay dos tazas en el fregadero y acabo de escuchar un ruido en el dormitorio", Lena expone los hechos y mira a su alrededor para escanear la habitación. Se da cuenta de la chaqueta detrás del sofá en el suelo y ve una camiseta de mujer negra al lado del sofá. Kara vio la ropa que se había perdido mientras ordenaba a toda prisa y entra en pánico más que antes. Ve que la mandíbula de Lena se aprieta.