Primer encuentro

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"¿Puedo simplemente decir que esta es una idea horrible? "Kara dice mientras espera junto a la puerta a Mogra.

"No, no lo es, trabajas en un imperio de los medios y si sucede algo fuera de lo común, lo cual estoy segura de que ocurrirá y estará relacionado con Lilian, lo sabremos  y estaré contigo para que no tengas que perder el tiempo de volver aquí por mi y ponerme al corriente, además iremos a uno de los laboratorios de Lilian durante el almuerzo de todos modos. No veo la diferencia en que te acompañe en el trabajo", explica Mogra mientras busca en el guardarropa de Kara algo para ponerse.

"Puedo volar de allí hasta aquí en segundos, lo sabes"

"Voy contigo a CatCo y eso es definitivo"

"Eres tan terca como Lena" murmura entre dientes, y de inmediato alza la voz a un tono normal "¿Puedes por lo menos darte prisa? Vamos tarde"

"¿Dónde pusiste tu maldita sudadera con capucha?", Mogra asoma la cabeza desde el dormitorio.

"La dejaste junto al sofá tan pronto como entramos aquí ayer, así que ni siquiera intentes echarme la culpa", dice Kara y comienza a quejarse "por favor, por el amor de Rao y todo lo que hay, ¿podemos irnos ahora?"

"Joder, eres molesta" Mogra agarra la sudadera y se la pone mientras camina hacia la puerta donde Kara la está esperando con un leve puchero.

"Sabes que puedes volar al trabajo y yo puedo teletransportarme, ¿verdad? Solo tomará unos segundos como dijiste, honestamente, no entiendo por qué estás tan nerviosa"

"Porque necesito mi chocolate caliente y el clima está estupendo hoy, así que quiero caminar, ¿vale? Snapper me va a matar si llego tarde otra vez", Kara agarra a Mogra de la mano y comienza a caminar, casi trotar mientras arrastra a la pelinegra, que ni bien se ve fuera del edificio pone los ojos en blanco y ralentiza su caminar para molestarla.

"¡Mogra! ¡Colabora un poco!", Kara usa su otra mano para sostener el otro brazo de Mogra, lo que las deja en una posición semejante a un abrazo de lado mientras la arrastra por las concurridas calles un lunes.

"Sí, sí, rubia mandona" Mogra suelta una risita y comienza a caminar un poco más rápido para que la kryptoniana deje de bufar y resoplar en las calles. Mogra sonríe todo el camino hasta el café porque Kara todavía la abraza y la arrastra.

"Bonita sudadera con capucha, por cierto", se burla Kara mientras entran en un café y hacen fila. Por supuesto iba a burlarse, la prenda le pertenecía o al menos fue así hasta que Mogra la vio y reclamó como suya, pese a la basta colección que había hecho después de la tarde de compras en días anteriores. Era el tercer día que la ocupaba, si no fuera porque cambiaba su calzado y jeans, que por supuesto eran negros en todas sus variantes, cualquier otro diría que iba siempre con la misma vestimenta.

"Cállate, es cómoda, además fuiste tu quien dijo que no debía usar solo negro" Contesta cruzándose de brazos.

"¿Cómo me veo ?", Kara pregunta mientras mira su propia ropa. Iba con sus típicos pantalones caqui, un abrigo azul oscuro con un cinturón marrón. Menos mal llevaba el abrigo, pensó Mogra porque de haber ido solo en la camisa que le había visto en el desayuno,no habría podido molestarla.

"Te ves... no mal" Y lo piensa, realmente piensa que Kara se ve bien, muy bien de hecho, porque le había hecho sentir cálida en muchos lugares, pero no podía decirle eso a la kriptoniana.

"¿Eh?, ¿felicitándome ahora? Un poco más y algunos dirán que te gusto, cuidado ahí", se burla Kara y da un paso en la línea que se mueve hacia el mostrador.

"No te hagas ninguna idea graciosa, todavía no me gustas. Simplemente no quiero que vayas al trabajo con los ojos hinchados, la gente podría pensar que te intimido", se defiende Lena.

Para ser tuyoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora