Beautiful Lies; Vinnie Hacker //en corrección//

25. pt.1

-CHIARA! CHIARA DONDE ESTAS?!- algunas voces se filtraban tras el gran muro frente a mi.

En realidad no estaba muy consciente de mi misma, sangre escurría de mi frente al igual que mi cuerpo. Estaba tan adolorida que no lograba abrir los ojos por completo.

Mi corazón estaba tan acelerado pues se escuchaban disparos y gritos. Hasta que una linterna apuntó justo hacia mi cara.

-LA ENCONTRE!- la voz de una mujer que claramente no conocía grito y de la nada tenia a muchas personas rodeándome y apuntándome con sus linternas.

Hasta que uno de ellos tomó la iniciativa y se acerco a mi. Cuidadosamente quito las cuerdas de mis manos, dejando así que escurriera más sangre de estas, gracias al forcejeo entre estas. Corto la cinta que juntaba mis pies y entonces me miro.

-Chiara, estamos aquí, debes mantenerte despierta bien? Solo no cierres los ojos- tomo mi mentón y lo levantó con mucho cuidado haciendo que lo mirara.

Su voz ni siquiera era tan clara para mi, solo asenti.

-bien, no duermas- dos personas mas se acercaron a mi y me cargaron para así llevarme a lo que parecía ser una ambulancia.

La distinguía por las luces que miraba borrosamente gracias a las lagrimas que mis ojos contenían.

Fui recostada en una suave cama que mi espalda recibió con mucha comodidad. Y esta rapidamente se empezó a mover.

-Nombre Chiara D'Angelo, edad 17 años, presenta fuertes heridas en el cuerpo y evidentes indicios de abuso sexual- alguien informó y mi pecho dolió.

-linda, hola, soy Grace y te voy a atender bien? Necesito que me digas cuál es tu nombre- una doctora se me acerco y me pregunto.

-Ch-Chi- mi mandibula dolia por el simple hecho de moverla un poco.

-Chiara, eres Chiara, muy bien, ahora dime que te causa malestar en este momento- comenzo a escuchar mi corazón y yo solo respiraba.

-bien, necesito que cuentes hasta diez cuando yo te diga bien? Lo puedes hacer mentalmente si quieres- asenti.

Senti un pequeño pellizco en mi mano derecha y la doctora comenzó a contar de 10 hasta 1. Hasta que no aguante mas y caí dormida.

Narrador Omnicente

Chiara fue llevada de urgencias al hospital, sus heridas eran sumamente graves pues además de haber sido abusada, había sido maltratada tanto psicológicamente como mentalmente.

Aquella chica fue sometida a una cirugía en la que representó muchos riesgos al tener la cabeza con serias heridas y posibles traumas, además de sus heridas en todo el cuerpo que empeoraban todo. Había sido brutalmente golpeada varías veces y eso era evidente.

Todos a su al rededor estaban tan sorprendidos de ella. Sus heridas no las hubiera aguantado una chica de su edad comun. Y aun así ella seguía respirando. Pero nadie sabía que dentro de sus sueños se encontraban las verdaderas pesadillas.

Todo lo que ocurrió en esos dos dias se repetía en su mente, lo único que quería era despertar pero por alguna extraña razón no podía.

Después de varias horas en estado crítico fue llevada a una habitación en donde ella debía estar tranquila y descansar de todo lo ocurrido.

Su mejor amiga, Charli, no tardo en enterarse de la situación y no dudo en ningún momento llegar corriendo al hospital y preguntando por Chiara. Para ella Chiara se había convertido en una hermana más, y sin ella se sentía incompleta.

Al entrar en esa blanca habitación y ver a su amiga de esa forma la destrozó de una forma inigualable.

Se sentía tan impotente de no poder haber hecho nada, odiaba a todos y cada uno de los humanos en este planeta, odiaba las razones por las que no pudo estar con ella desde mucho antes, apoyarla, decirle que no estaba sola, que ella no debia callar, que todo en algún momento iba a parar. Pero no, lloraba incontrolablemente al recordar todo lo que Chiara le había contado esa noche, la horrible vida que vivió y a pesar de todo ella seguía aquí. Y entonces soltó una pequeña risita al recordar que alguna vez la misma Chiara menciono "yo nunca pierdo, no esperes que me apiade de alguien que no me importa en absoluto". La frase era tan ironica, ella no se iba a rendir y eso la tenía tranquila, pero nadie iba a reparar los horribles recuerdos de su adolescencia.

Se supone que la adolescencia es para disfrutarla, salir, divertirte, emborracharte hasta no poder más, tener novios, romper corazones, que te rompan el corazón, enamorarte, disfrutar de la juventud. Pero en lugar de eso, te da miedo salir de fiesta, te da miedo que te droguen y amanezcas tirada en la calle o incluso tener miedo de ya no despertar. Te da miedo llegar a tu propia casa en donde eres constantemente abusada o juzgada. Te da miedo ser tu por que todo lo critican y amenzan. Te da miedo ir a la escuela, en donde profesores o incluso directivos te acosan. Te da miedo despertar en una habitación blanca, conectada a cables y que te informen que necesitas ser revisada por un ginecólogo, por que al parecer fuiste abusada sexualmente. Justo como Chiara y muchas chicas y chicos lo están haciendo en este momento, en cualquier parte del mundo.