Elizabeth
La vida nos golpeará mil veces, nos pondrá miles de obstáculos con el fin de superarnos a nosotros mismos, aun cuando creemos que no somos capaces de hacerlo, nos enseñará que algunos cambios eran necesarios y que solo el tiempo nos mostrará si hemos tomado la decisión correcta, o no.Siempre he pensado de esa manera, porque sinceramente, la vida no ha dejado de darme golpes. Me caigo y me levanto, pero después me vuelvo a caer. Es como si dijera ¨Oh, mi vida no podría ser peor¨ y esta va y dice ¨Ja, no me retes hpta¨.
Sí soy un poco pesimista, que puedo decir. Después tener una fuerte discusión con mi madre y decidir venir a Los Ángeles a vivir con mi padre y su nueva familia, al cual no le he dirigido la palabra en tres años, mi mente no está como para pensar en arcoíris y unicornios.
Joder, odio los aviones, porque razón mi padre tendría que vivir tan lejos, a todos nos gusta la playa esta bien, pero la gran ciudad de Manhattan no esta tan mal. Ok, Liz, relájate respira, inhala...exhala, ya falta poco...pero es que estamos muy alto, los arboles parecen hormigas hay dios mío me va a dar algo, putos aviones, putas alturas, putas hormigas.
-Señorita, ¿necesita algo? - una joven azafata me pregunta rescatándome de mi ataque de pánico. ¿Que qué necesito? Bajar, bajar de aquí es lo que necesito.
-No estoy bien, gracias - respondo con una leve sonrisa mordiéndome la lengua conteniéndome para no soltar lo que tengo en mente.
Respiro profundamente y saco mi móvil para escuchar un poco de música y así tratar de pasar los minutos que quedan sin empezar a gritar como una histérica. Me coloco los cascos y doy play a la música, la primera canción en la lista es Follow You, de Bring Me The Horizon, un poco de rock, aunque si escucharais todas las canciones de mi teléfono, os aseguro que no sabríais si soy joven, vieja, emo, hippie, romántica, o si quiero matar a alguien, yo misma siempre me pregunto ¿Qué cojones soy?
La siguiente en reproducirse es Bellyache, de Billie Eilish, veis lo que os digo, nada que ver con la anterior, pero la amo. Ahora si no me importa nada, siento la música resonar en mis oídos, la tarareo en mi mente con unas inmensas ganas de cantarla a todo pulmón, pero no lo hago, no quiero hacer ningún espectáculo, y no porque no sepa cantar, la verdad es que se me da muy bien, sino por el simple hecho de que estoy en una puta chatarra voladora, JODER, aquí viene de nuevo el pánico.
Pasan unos minutos cuando visualizo a lo lejos el aeropuerto, ya falta poco.
El avión está apunto de aterrizar, me sujeto a mi asiento como si mi vida pendiera de ello, y lo hace técnicamente. Las ruedas del avión empiezan a tocar el suelo y hace que este de pequeños saltos hasta estar completamente en la pista y comienza a detenerse, ya casi joder.
Me asomo por la pequeña ventanilla y los latidos de mi corazón van disminuyendo hasta volver a su ritmo normal... ya... estoy en tierra firme.
Los demás pasajeros se levantan y recogen sus pertenencias para comenzar a bajar del ave metálica, y yo sin pensármelo dos veces, hago lo mismo. Después de pasar por un túnel conectado al avión llego a la sala del aeropuerto y siento como por fin llega el aire a mis pulmones, parecía que hubiera dejado de respirar durante todo el viaje. Sostengo con fuerza la mochila que cuelga de uno hombros y la maleta que llevo en la mano, y me dirijo a la salida con ansias de salir completamente de ese infierno, solo para entrar en otro.
Saco el celular del bolsillo de la chaqueta y llamo inmediatamente a mi padre que se supone que estaría esperándome en la salida, y que puff, había desaparecido porque ahí no había prácticamente nadie, que conociera al menos.
ESTÁS LEYENDO
Sentimientos del Pasado
Teen Fiction[En curso] Nueva vida, nueva ciudad, nueva casa, nueva familia, nuevo hermanastro. Elizabeth tendra que aprender a convivir con su hermanastro Peter el cual no hace más que sacarla de sus casillas cada ves que puede. Son como dos niños peleándose po...