Renjun no pudo evitar pensar que, hace unos meses, si alguien le decía que iba a invitar a Jaemin a almorzar con él y Chenle, habría dicho que estaban drogados.
Pero aquí están.
Renjun se siente tan cómodo con Jaemin que comienza a estar más cerca él. Comienza con ellos sentándose al lado del otro en clase, compartiendo memes cuando se envían mensajes y Jaemin llamándolo porque no quiere ir a la tienda de conveniencia solo. Luego se vuelve más frecuente. Comenzaron a salir fuera de clases, a hacerse preguntas random a las 3 a.m. y, finalmente, se llamaban más que mandarse mensajes.
Jaemin también comienza a unirse a Renjun durante el almuerzo con más frecuencia. A veces, Chenle lo acompañaba cuando no estaba con Jisung. Jaemin y Chenle, que probablemente se conocieron antes por cortesía de Jisung, parecen llevarse bien. Más aún si ambos se burlan de Renjun.
Por eso, no es ninguna sorpresa cuando Jaemin, Chenle y Renjun están en el café cerca de su universidad para almorzar juntos otra vez.
—Injunnie —dice Jaemin. Había estado llamándolo así desde que se enteró del nombre coreano de Renjun—. ¿Te gusta más el americano o el latte?
Renjun arruga la nariz.
—No tomo café.
—No eres divertido, Injun. Prueba algo nuevo para variar —se queja Jaemin, comiendo un poco de su pan.
—Mira quien habla, hyung. Tomarías café todos los días por el resto de tu vida si no recuerdas que la salud es una cosa —comenta Chenle.
—Tú no puedes hablar, Lele —Jaemin alza su voz a propósito, en un intento de imitar la voz de Chenle—. Tú y tu adicción al té no son mejores que yo y mi adicción al café.
—Los dos son un caso perdido —murmura Renjun, mientras mueve su chocolate caliente con la pequeña cuchara que les dio el café.
—¡Por eso te necesito, Injunnie! Eres la luz que me guía lejos de la oscuridad. Que en este caso es mi adicción al café —Jaemin le guiña un ojo a Renjun. Renjun sólo finge náuseas en respuesta mientras evita las miradas de complicidad que Chenle le da.
—Pide un jugo, Jaemin. Creo que ayer bebiste 2 vasos de café —dice Renjun.
—¡Okay! —Jaemin sonríe—. Pero primero, voy al baño.
Jaemin se levanta de su asiento y se dirige al baño. Renjun sigue comiendo su comida. Cuando levanta la vista, Chenle ya lo está mirando con las cejas levantadas.
—Entonces —comienza Chenle, poniendo su cuchara y tenedor sobre la mesa—. ¿Están saliendo? —Chenle mueve las cejas hacia Renjun.
Renjun se burla.
—¿No? Yo y Jaemin somos buenos amigos. Además, sabes que tengo un crush por Nana.
Chenle hace un murmullo como si entendiera. No lo hace, Renjun lo sabe porque Chenle le lanza otra mirada de suficiencia.
—¿No deberías preocuparte por tu propia vida amorosa? —menciona Renjun.
—¿Qué vida amorosa? —tanto Renjun como Chenle casi saltan ante la repentina aparición de Jaemin, haciendo que Jaemin se ría mientras regresa a su asiento.
—¿De qué hablan? —pregunta Jaemin. De alguna manera, la forma en que le sonríe con suficiencia a Chenle le dice a Renjun que ya lo sabe.
—Nada —niega Chenle, con la cara roja.
—¿Estás seguro? —Jaemin mueve las cejas haciendo que Chenle entrecierre los ojos hacia él.
Justo cuando Chenle está a punto de responder, un sonido proviene de su celular. Aparentemente, después de revisar la notificación, es la señal de Chenle para irse.
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A Heart For A Heart ›› renmin
Hayran Kurgu―¿Qué pasa? ―pregunta Chenle antes de que Renjun pudiera hablar. ―Es sólo que... Estoy pensando en algo ―responde Renjun genuinamente, mirando la televisión. Chenle hizo un murmullo en respuesta, esperando a que Renjun continuara―. ¿Es posible enamo...