°Harry Potter-One Shots°

Ron Weasley

Pedido de 

- ¡Hey, Weasley! - ser mejor amiga del trío de oro es lo mejor - ¡Harry, Hermoine! - les pasaste un brazo por los hombros a cada uno.

- Qué injusto- dijo Ron en un susurro que alcanzaste a oir.

- ¿Qué es tan injusto, Ronie? - dijiste divertida.

Se sonrojó ligeramente.

- Primero, no me digas Ronie, y segundo, es injusto que a ellos los mimes más que a mi- el pelirrojo se cruzó de brazos.

- ¿Y por qué habría yo de mimarte más?.

- Porque soy tu novio- dijo sin pensarlo.

- ¿¡Qué!?- dijo Hermoine.

- ¿¡Qué?!- este fue Harry.

- ¿¡KEH?!- estos fueron los gemelos Weasley que aparecieron de repente.

- Tenías que ser Weasley- regañó Aroa. Ron sólo rio nervioso y miró con nerviosismo a Harry. Harry tenía la típica cara de hermano sobreprotector que decía: aléjate de ella antes de que te rompa la cara de un sillazo.

- Harry, jeje, este... Te lo iba a decir... e-estoy saliendo con tu hermana- dijo totalmente aterrado. 

- Contigo hablo después- apuntó Harry al penúltimo Weasley- y tú, Aroa Lily Potter Evans, cómo se te ocurre, estás muy pequeña para tener novio.

- Tengo 15, ya no estoy pequeña. A demás, tu sales con Ginny y nadie te dice nada.

- ¿¡Qué?! - Ron.

- ¿¡Espera qué?!- Hermoine.

- A no mames eso ya lo sabíamos, dah- los gemelos.

- Ahora si estás muerto, Potter- Amenazó Ron a Harry.

- A ver nenas, ustedes dos se calman- Aroa los señaló- dejan su lado sobreprotector-homicida a un lado y me dejan vivir mi vida.

- Bien, entonces, con permiso - Ginny llegó y Harry la tomó de la cintura haciendo hervir la sangre a Ron.

- Con permiso entonces- dijo Aroa entrelazando su mano a la de Ron. Esta vez a Harry le molestó.

- Entonces, nos disculpan- dijeron los gemelos con gracia y tomaron de los brazos a Hermoine haciendo que esta se elevara. 

- ¡Bájenme ahora, malditos inútiles! ¡Suéltenme ahora!- se retorció la chica. Los chicos rieron y bajaron a Hermoine de sus brazos. Ella les dio una mirada de desaprobación y se fue.

- Le quita lo divertido a la vida- pronunciaron al mismo tiempo los gemelos.

Mientras tanto, Aroa y Ron estaban más ocupados en sus labios que en dónde estaban.

- ¡Aahhh mis ojos!- dijo George.

- ¡Consíganse una habitación!- dijo esta vez Fred.

La pareja se rio y entrelazaron sus manos. Se fueron hasta la torre de Astronomía y pasaron la tarde allí.

- Qué sería de mi si no estuvieras a mi lado- dijo Ron apoyado en el hombro de Aroa. La volteó a ver- te amo.

Se besaron. Pero fue un beso distinto a los anteriores. Este estaba lleno de ternura y cariño, de paz y un poquito de deseo.