Parte 5

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Kibum se prepara como lo hace cada mañana. Se viste con su ropa más cómoda, con sus accesorios favoritos como el anillo que usa como pareja con Jonghyun y una esclava de oro que le regaló Taemin en su cumpleaños tres años atrás.

Finalmente se coloca frente al espejo para terminar de peinarse y hacer lo que Jonghyun llama en modo de burla, “un ritual de cremitas” lo que causa una sonrisa en Kibum cada vez que lo recuerda.

Se mira en el espejo y acomoda los mechones de su cabello, baja la vista para tomar un poco de loción y, al levantar la vista de nuevo se encuentra con una persona a quien no conoce. De pronto se siente alarmado, porque hay alguien desconocido justo delante de él, dentro de su casa. Piensa como debe de actuar porque está solo, Jonghyun no está con él en ese momento y si ese extraño quisiera, podría hacerle daño y nadie se daría cuenta hasta mucho después.

El rostro delante de él se mantiene igual de impasible, lo observa con fuerza, con mucha intensidad y de alguna manera le resulta conocido, como si lo hubiera visto en algún lugar, pero no logra recordar en dónde. Es un joven, quizá de su misma edad con un cabello rubio como el suyo, pero hay algo en su mirada, más allá de las ojeras qué hay debajo de sus ojos, que hace que su mirada se vea quizá nostálgica, quizá un poco rota, un poco incompleta.

Kibum aparta la mirada para tomar su celular y cuando vuelve sus ojos al frente, ese desconocido ya no está, solo queda él mirando su reflejo. Lentamente deja su celular de vuelta, simplemente analizando lo que acaba de pasar mientras se ve a sí mismo en el reflejo. Y cuando por fin lo comprende, no quiere aceptarlo, simplemente termina lo más rápido que puede y sale rumbo a su destino.

🥀🌙

KIM JONGHYUN:

Luego de estar sentado esperando a Kibum por más de quince minutos, me levanto del sofá, guardando mi celular en el bolsillo y avanzando por el pasillo hasta el baño.

—Bum, ¿Todo bien? — no recibo respuesta así que sigo hablando — Cariño, ya es tarde.

Abro la puerta, esperando ver a Kibum aún vistiéndose o algo. Pero lo que encuentro es algo extraño. Kibum mira fijamente su reflejo, con unos ojos asustados y su cara pálida. Casi como si esperara que su reflejo saltara a atacarlo en cualquier momento.

—¿Kibum? — mi mano sube pero se detiene antes de tocarlo, porque no se si sea buena idea — ¿Mi vida? — trato de llamarlo otra vez.

Da un paso atrás, casi como a punto de escapar, así que decido tocarlo, mi mano llega a su hombro. Y él hace un movimiento rápido, mirándome con ojos cristalizados.

—¿Bum? — vuelvo a susurrar — ¿Qué pasó?

—Nada — habla rápido — estoy bien, yo… Estaré listo, dame dos minutos — me empuja dejándome confundido, hasta casi golpear mi cara al cerrar la puerta.

Minutos después Kibum sale del baño como si nada hubiera pasado y yo prefiero no tocar el tema, sé que si lo presiono de más terminará enfadándose conmigo y no quiero que un buen día termine en eso. Mientras conduzco el auto Kibum cambia las canciones del radio y parece estar de muy buen humor, cosa que me resulta un poco extraña porque él odia las visitas al doctor.

Cuando llegamos al consultorio caminamos hasta la entrada tomados de la mano y después de que la secretaria confirma la cita y le indica que puede pasar, yo me siento en la sala de espera y tomo una revista para pasar el tiempo.

Dos horas más tarde Kibum sale del consultorio y se ve tranquilo, pero el doctor me hace una seña para que entre con él y yo le indico a Bum que me espere antes de entrar. Me siento en el sillón frente a él esperando a que termine de hacer sus anotaciones en su libreta.

~ Losing You ~ JongkeyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora