'Amigos'『Xingyun』[HIATUS]

9-Pain.

⚠Drama, violencia.

(Narrador omnisciente)

Había pasado un meses trás aquella acumulación de desastrosos y seguidos eventos que habían llevado hasta este punto de desesperación.

Chongyun se sentía realmente deprimido, había intentado acercarse hasta el hogar del mayor en repetidas ocasiones, sin lograr absolutamente nada, siempre era expulsado antes de poder hacer siquiera un leve movimiento cerca de la propiedad privada de esta lujosa "familia", si así podía considerarse.

El joven estaba tan deprimido que había dejado de salir de hogar, sus padres estaban realmente preocupados al igual que sus dos amigas, las cuáles habían estado llendolo a visitar rutinariamente sin éxito, él no quería visitas, solo lo necesitaba a él.

Tan grave era el caso que incluso había dejado de consumir helados por su condición, simplemente cerraba la persiana de su habitación y lloraba, sumido en un silencio que lo consumía, y sin las diarias bromas y diversiones de su compañero favorito.

Tampoco faltaron los rumores, algunos decían que el joven espadachín había desaparecido o escapado del lugar, las especulaciones de los habitantes llegaban al punto de decir que este último había sido secuestrado por algunos de los indeseables con los que su progenitor trataba diariamente, Chongyun quería gritar escuchando estos comentarios, todos eran una panda de bárbaros insensibles.

Aun así sabía a que se debían estos rumores, el mayor había pasado de ir diariamente a la biblioteca local, al restaurante Wamin o simplemente a pasear por la zona acompañado de Yun a no dar señales de vida y dejar de visitar estos lugares tan frecuentados.

El menor no lo soportaba, debía aguantar todo tipo de clases de comentarios ajenos preguntándole por el de cabellos azules cada vez que se animaba a salir durante un breve espacio de tiempo y no podía evitar derramar alguna que otra lágrima, siempre acababa corriendo de estos escenarios dolido, con la mano en el pecho o en la cabeza, mientras un pensamiento de culpa pasaba por su mente.

Debido a esto había decidido no volver a salir de su habitación, trancaba la puerta y simplemente se tendía sobre la cama de su pieza.

En repetidas ocasiones intentó sin éxito salir a cumplir su papel como exorcista a pesar de estar en sus completas vaciones, aun así, aquello no aliviaba su continuó vacío.

No estaba bien, su condición realmente no le afectaba, se sentía helado, pero era una sensación desagradable, como un vacío extraño que se arremolinaba en sus entrañas y corazón amenazando con salir en cualquier momento del joven, que comenzaba a perder el brillo de sus ojos, aquel brillo que las divertidas, incluso las molestas bromas del mayor le brindaba con calidez.

Llevaba semanas pensando como comunicarse con el otro chico, con que el contrario se encontrará bien y no fuera obligado a nada por su padre ya se sentiría realmente aliviado, su agonía reduciría drásticamente.

Aunque este no era el caso.

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Por otro lado el joven galante se hallaba igualmente tendido sobre la cama de su pieza, mirando al techo de esta con una mirada perdida, como observando una lejanía inexistente, tal era el caso que su sentido del humor se veía apagado, no gastaba bromas e incluso había perdido el placer y el interés por la lectura que tanto amaba, no se sentía seguro de casi nada, lo único que tenía claro era que lo necesitaba a él.

Llevaba semanas encerrado en esa habitación por culpa de su despreciable "padre", ni así merecía que lo llamará, esa era una forma de llamarle demasiado preciada para ese ser inmundo que imponía su trabajo ante la felicidad de su propio hijo menor.