10-Compromise.

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⚠Malas palabras, violencia.

Aquella extraña mujer recién llegada se dispuso a hablar con una mirada seria, incluso penetrante, clavada en la portadora de aquellos bellos y largos cabellos azulados.

Esta fue interrumpida por la misma mujer que observababa minuciosamente momentos antes.

-¿Se puede saber como has entrado..-fue interrumpida por un carraspeo masculino ajeno.-Eso no es lo importante ahora, vallamos al grano de una vez con esto.-Respondió una voz ronca, proponiendo la vuelta al tema inicial.

La modelo cerró la boca antes de pronunciar otras nuevas palabras al sentir como su marido volvía a ejercer presión sobre su muñeca, inmovilizandola, dándola a entender que perteneciera callada, en un silencio vacío.

-En fin.-La mujer sostuvo su cabeza con una de las manos que tenía apoyadas sobre la mesa de madera de abedul de aquella sala, giro su mirada hacía el progenitor del joven de cabellos azules, intimidandoló.-Vengo a proponer matrimonio- Hizo énfasis en aquella palabra.-entre su hijo, ¿Xingqiu se llamaba?, y mi subordinada.

La modelo se sintió mareada y pálida de pronto, miraba incrédula a aquella adulta señora que vestía un vestido negro escotado, que proponía aquello tan absurdo, fue a mencionar unas palabras de queja pero su marido la presionó de nuevo, preveniendo esto, forcejear sería estúpido contra aquel fornido hombre.

-Hu Tao, cariño, pasa.-La recién nombrada abrió la puerta de la habitación, introduciéndose en ella, era la joven del traje negro y las dos coletas, la misma que había incomodado a Yun y había recibido un golpe por parte del joven galante.

-Ella es mi subordinada, Hu Tao.

-¿Por qué aceptaríamos casar a nuestro hijo con la subordinada de una desconocida?-Hu Tao tomó asiento al lado de aquella mujer trajeada de negro.

-Fácil, tampoco tenéis opción de chance.-Una sonrisa amenazo con aparecer sobre los labios de la perversa mujer.-Yo presencié todos los hechos que podrían perjudicar tanto a vuestra familia y reputación como a vuestro negocio.

El progenitor del joven trago saliva pesadamente, ajustándose la corbata, si la mujer decidía desvelar todo aquello se arruinarian, su reputación descendería radicalmente hasta el punto de ser destronados de la cima de comerciantes de la ciudad en la que residían.

-Acepta lo que te ofrezco y permanece en la cima, tu hijo heredero se casará con está joven heredando vuestro negocio y continuando con ello, yo misma me aseguraré de que así sea.-Se llevo la mano al pecho como realizando un juramento invisible e inaudible.-Es una forma de controlar a vuestro hijo, curarlo e incluso atarlo a está situación, no dará más problemas, incluso si lo desea, podemos forzar el nacimiento hijo para 'acortarle la cuerda' aún más.

La madre del recién nombrado se sentía en medio de la época mediaval, su hijo tenía 17 años, le parecía un chiste lo que decía esa mujer, ¿en serio se atrevía a proponer algo tan ridículo? Quería protestar, quería liberar a su hijo antes de que esos dos bárbaros le hicieran algo de lo que se fueran a arrepentir, pero no podía hacer nada de eso, su marido se lo impedía al igual que su creciente enfermedad y su decreciente salud.

-...-El progenitor suspiró y carraspeo aclarando nuevamente su garganta.-Está bien hagámoslo así, aceptó tu propuesta.-Este pensó en tomar rienda de ellas y simplemente mandar a alguien a acabar con ellas sin mancharse las manos, pero lo de controlar a su hijo de aquella manera había atraído su atención obligándole a aceptar, más adelante seguiría pensando sobre el tema, él jamás fue un hombre de palabra.

La mujer sonrió con un aura oscura estrechandole la mano al hombre, pasándole al mismo tiempo un contrato que este firmó sin problema alguno trás leerlo repetidamente buscando algún truco por parte de la mujer.

-¿Cómo pretendes hacer la boda?-Mencionó este interesado.

-Uhm, esperaba que preguntarás eso, esto no va a ser cómo el típico cliché repetitivo en el que el enamorado llega a la boda a irrumpir y estropear los planes, casemoslos a la civil.-La mujer sonaba convencida.

-¿A lo civil?-Comentó interesada lo chica menor de cabellos marrones.

-Sin ceremonia, solo un contrato y la colocación de las alianzas con unos pocos invitados cercanos.-La mujer abrió una caja mostrando dos bellos anillos brillantes entrelazados entre si, forrados en diminutos diamantes esmaltados en oro y en piedras preciosas, los dos poseían una cianita tayada y envuelta en esmalte brillante, también se podían apreciar otras piedras más pequeñas, eran muy bellos y deslumbrantes, había de admitirlo.

-No te preocupes por nada, ya lo tengo todo preparado, sabía que aceptarías.

Joder si era lista la zorra esta.-El hombre no podía evitar pensar sobre la astucia de aquella desconocida mujer, le inquietaba.

Siguieron conversando durante un período de tiempo arreglando todo lo del compromiso, conversación que la portadora de cabellos azules no pudo escuchar, había quedado desmayada del mareo que le había producido escuchar tales estupideces mediavales sumado al hecho de que había olvidado consumir su diaria medicación.

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La mujer abrió los ojos de nuevo exhausta, ya no sentía la mano de su marido aplastando su muñeca con frialdad, solo sentía un dolor incesable y punzante.

Miró a su alrrededor por unos segundos recuperando la conciencia en su totalidad, observando que no había nadie en aquella sala, se levantó con algo de dificultad y toco la parte inferior de sus pantalones, sin hallar lo que buscaba.

-Mierda..., me ha quitado las llaves, no puedo abrir la puerta, menos auxiliar a Qiu, será hijo de la gran..-Por un momento recapacito, su madre era una persona realmente agradable.

La mujer por un segundo pensó en algo que pudiera servir de utilidad, giro la mirada, estaba en el salón-cocina de la casa, se dirigió impacientemente hacía la parte de la cocina, abrió los cajones de par en par hasta encontrar el que ella buscaba, el cajón de los cuchillos.-Joder.

Una idea paso por su cabeza, pudo no ser la mejor, pero lo considero como su única posibilidad.

-...-

Miró de reojo uno de los objetos metálicos, sentía su llamada, consideraba la posibilidad de agarrarlo y atacar a alguno de los que amanazaban con herir a su hijo, su mano tembló, pasaría de víctima a agresora.

Soltó el cuchillo, no iba a rebajarse al nivel de aquellos buenos para, buscaría una mejor solución, solo necesitaba un poco de tiempo.

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Mientras tanto la adulta mujer del vestido, la joven de las coletas y el progenitor del chico se aproximaban a la habitación de este para darle la noticia de su propio forzado compromiso.

Al abrir la puerta de la pieza del recién nombrado una desagradable sorpresa les azotó, el joven no se hallaba allí, las ventanas estaban intactas y no había rastro de él.

-¡Habrá oído lo del compromiso y habrá huido!, ¡será desgraciado!, cómo lo encuentre no va a poder ni moverse.-El hombre gritaba iracundo.-¡DESAGRADECIDO DE MIERDA!

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C o n t i n u a r á...

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¡Otro capítulo largo!, creo que voy a comenzar a hacerlos más largos, los disfruto más.

Muchas gracias por todo el apoyo aaaah, os quiero, no pensé que una historia de este tipo fuera a llegar a las 5K de leídos, voy para tirar cohetes.

Por cierto, muchas gracias a aquellos que votan y dejan esos comentarios, de verdad me rió como tonta con ellos. JAHSJAJAJA <33💕

-Qiu_nii

'Amigos'『Xingyun』[HIATUS]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora