Capitulo 04 🌖

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A media que entrabamos en el pueblo, este no se veía tan rural como Ben lo describía. Tenía un leve parecido a Squire Park en Seattle. Había una línea de luces en el suelo de la carretera que indicaban las salidas hacia caminos rurales y urbanos. Ethan pasó de estar relajado en el camino a verse muy tenso repentinamente. Creo que sabía porque era. Ben no tenía idea de que su mejor amigo había ido en mi rescate y no estaba del todo segur de como se lo tomaría.

Dos curvas a la derecha las casas comenzaban a aparecer en el camino. Era de madrugada, pero había bastante gente en la calle. Todo se veía hogareño, incluso en el exterior. 

- Mañana por la mañana te llevaré a la siguiente ciudad para que puedas comprar algunas cosas. Asumo que solo tienes lo puesto.

La voz de Ethan era bastante ronca. Y suspiraba al terminar cada oración. 

- No será necesario tanto. Apenas se den cuenta de que no pueden hallar a ''los ladrones'' me dejarán volver a tomar mis pertenencias. 

- Luna, no quiero sonar insistente, pero Ben no dejó nada en ese departamento que pudiera ser usado. Tu ropa, tus pertenencias... Nada de lo que tenías antes existe.

- Marina. Mi nombre es Marina.- dije. Quería aclarar eso desde un principio.

- Está bien, Marina.

Ben una vez me dijo que un alfa vivía con su luna y su beta en la misma casa. ¿Es donde quiere que vaya? ¿Es hacia donde vamos? ¿A su casa?... Si apenas pasamos un poco la raya se descontroló totalmente, ¿Cómo podríamos vivir bajo el mismo techo sabiendo que el otro está solo a unos metros?

- Vas a quedarte en el hotel que está en el centro.

Eso me hizo sonreír irónicamente ante lo inocente que fui por pensar aquello. Debí saber desde un principio que aun en su propio pueblo iba a tratar de ocultarme. 

- Es mejor por ahora mantenerte ahí. Trata de no salir hasta que Benjamin venga a hablar contigo. 

Unos minutos después estaciona el auto en una avenida frente a una plaza. Se baja primero, pero yo no. Una persona sensata en mi lugar llamaría a su padres y les inventaría una buena excusa para pedir ayuda, no dejaría que un total extraño la llevara a un lugar en el que solo viven criaturas sobrenaturales, que por cierto, son increíblemente más fuertes e intimidantes que yo. 

La puerta a mi lado se abre y me siento indecisa. Ethan mira mi rostro y lo veo ponerse en cuclillas. Toma algo de distancia, como si quisiera acercarse, pero algo físico se lo impidiera. 

- Escucha, Marina. No se quien eres, no tengo idea de que tipo de relación tienes con Ben, no se que intenciones tienes, pero lo que si se es que por alguna razón desconocida eres la Luna de esta manada. Dale una oportunidad a todo cuando se te presente el momento, por favor. 

Sigo con un poco de duda. Ethan extiende su mano para sacarme del auto y yo acepto. Quiero decirle que necesito tiempo, que necesito parar un segundo y sentir los pies en la tierra antes de continuar, pero su mano toma la mía y no puedo decir nada. 
El sonido de su celular llena el espacio y cuando lo saca de su bolsillo puedo ver en la pantalla su nombre. Alfa.

- Buenas noches, Alfa.- Su tono se vuelve formal en un segundo- Ella está bien. Está conmigo. 

Me mira para luego alejarse algunos pasos y hablar más bajo. Me quedo de pie en la entrada del hotel mientras miro todo a mi alrededor. Los faroles de la calle tienen bastantes detalles antiguos. Las personas que pasan me sonríen amablemente y yo hago lo posible por no parecer un nudo de nervios a punto de estallar. 

Ethan cuelga la llamada y se acerca para llevarme rápidamente al interior de la recepción. 

- Hagas lo que hagas no se te ocurra salir de la habitación

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- Hagas lo que hagas no se te ocurra salir de la habitación. Y por ningún motivo hables con nadie hasta mañana- Me dice en voz baja. 

Me toma de la mano y me lleva al segundo piso del hotel, en la habitación que tiene vista hacia la avenida principal y hacia el bosque que está detrás de esta. Al abrir la puerta me pide que me meta en el pequeño closet. Entro en el espacio y abrazo mis rodillas para que Ethan pueda cerrar correctamente. No pasan ni diez segundos cuando escucho el ruido de la puerta de la habitación abrirse con fuerza. 

- ¿Dónde está ella?- Tiene super audición y olfato ¿No puede sentirme?

- Deberías estar descansando. Tus heridas son bastante serias.

- Sabes que no me importa eso ahora. Mañana estaré bien. No cambies el tema.

- Entonces mañana podrás hablar con ella. Y también podrás pedirle perdón por lo que hiciste.

.- Yo-yo no...- Suena descolocado, algo anda mal. No sé cómo lo sé, pero puedo sentirlo. 

- Si. Tú sí, Ben. Porque ella no tiene que pagar por tus errores. Ya hiciste suficiente.

- ¿Marina? ¿Estás aquí, no es así?- me habla desde donde está.- Por favor, solo quiero verte y saber que estás bien, saber que no te hice nada. 

¿O sea que no quiere verme por mí? ¿Quiere saber que estoy bien para calmar su conciencia?

- Marina, por favor...

Su tono suplicante despierta emociones que jamás imaginé sentir. Y no puedo decidir si es el vínculo o si en verdad es porque le quiero. E imagino que, si yo tengo esta duda, jamás sabré realmente si Ben me quiere o si solo se deja llevar por la conexión que tenemos.

Escucho unos pasos acercarse, pero la puerta jamás llega a ser abierta.

- Basta, Ben. No hagas esto ahora. Vas a perder el control otra vez y la vas a dejar expuesta frente a todos. Es una luna humana. Tarde o temprano van a venir por ella. 

Todos mis sentidos se ponen en alerta cuando escucho la última frase. ¿Venir por mí? ¿Quien? ¿O quienes?.

- Mañana vendré por ella. Y no vas a poder impedirlo. Es mi luna, mi compañera.

- Recuerdo que es tu compañera, pero es la luna de todos. Tengo todo el derecho a defenderla. Incluso, a defenderla de ti.  

Escucho un gruñido escalofriante y luego un fuerte estruendo. Creo que me quedo en la oscuridad por al menos unos minutos antes de que Ethan abra ambas puertas y me ayude a salir con una mano. Me pongo de pie mientras él apaga la luz principal y deja solo encendida la luz de la mesa de noche. 

- Debes tener mucho en qué pensar. Te dejaré sola esta noche para que puedas descansar. Pero debes saber que si pude detenerlo esta vez fue solo porque Ben se encuentra débil.

- ¿Por qué?- Me apresuro a preguntar, tengo las emociones a flor de piel y siento que en cualquier momento la ansiedad me va a ganar. 

- Porque te encontró, y aunque la conexión entre ustedes es bastante fuerte, con el paso del tiempo se debilita al punto en el que el Alpha pierde poder. No creas que es tu culpa o algo así, es solo que supongo que Benjamin tiene mucho que decirte y que si no lo ha hecho es por una razón. 

- Porque soy humana- Aseguro.

- Y porque aún en el mundo de lo sobrenatural, hay reglas que se deben seguir. Y tener una mate de otra especie, no es una de ellas. 




Alpha: Moon's always rightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora