Capitulo 05 🌖

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La luz del sol apenas se asomaba por la ventana e iluminaba la pintura blanca de la habitación. Escuchaba el cantar de los pájaros y el despertar del pueblo, con el ruido de los autos y personas murmurando por las calles. Sin embargo, parecía que yo aun no despertaba del todo. Había podido dormir un par de horas cuando la vibración en las ventanas de mi habitación me despertó, y de pronto solo pude pensar en lo aterrador que sería salir por esa puerta para enfrentar todo lo que estaba pasando. Intentar adaptarme y darle la mejor sonrisa a un mundo que ni siquiera sabía de mi existencia. Abrazaba la sabana cuando la puerta de la habitación comenzó a sonar. No quería poner los pies en la tierra, pero finalmente tuve que hacerlo. La condenada puerta no dejaba de sonar.

- Señorita Marina, hora del desayuno- dijo la voz. Sonaba a un hombre mayor.

Apresuré a ponerme la bata de baño que estaba colgando detrás de la puerta y abrí despacio.

- Beta Ethan nos ha pedido subirle el desayuno. Y también pidió que le diera un mensaje. Me pidió que por favor le dijera que pasará por usted a las once treinta para llevarla a conseguir lo que necesita. 

-  Gracias por el mensaje- le sonreí mientras recibía la bandeja con café y un croissant  a su lado. 

Cerré la puerta luego de que el señor se hubiera retirado con una sonrisa

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Cerré la puerta luego de que el señor se hubiera retirado con una sonrisa. Dejé la bandeja sobre la mesa del pequeño escritorio de la habitación y tomé el café en las manos. Estaba demasiado cargado y sin una gota de leche, seguramente una gota de esto y el baño sería ambiente seguro por los próximos tres días. Dejé el café de lado y solo comí el croissant. Miré mi rostro en el espejo y me di cuenta que mis ojos lucían cansados y un poco ojerosos, pero no tenía maquillaje para mejorar el panorama así que solo queda afrontar el día de la mejor forma. El reloj de la pared marcaba las diez con cincuenta minutos cuando unos golpes en la puerta sonaron. Miré todo a mi alrededor; apenas si había movido las sabanas para acostarme en la cama y la toalla de baño ya estaba en la cesta de la ropa sucia. Ni siquiera sabía si iba a quedarme aquí ni por cuanto tiempo sería esto.

- Enseguida abro- avisé terminando de acomodar las almohadas en la cama.

Me acerqué a la puerta, pero no abrí de inmediato. Mi corazón se acelera en un instante. ¿Y si es Benjamin? ¿Que tal si es él? ¿Qué pasaría si abro la puerta y no soy capaz de detenerlo?

- Luna, he llegado antes...

La voz de Ethan es como un balde de agua fría en mis cinco sentidos. Dejo salir el aire atrapado en mis pulmones y abro la puerta.

- Buenos días, Luna. Te he traído un par de cosas que pueden interesarte.- Dijo dándome una bolsa de papel cerrada con cinta adhesiva. 

- Buenos días, Ethan. Creo que ya habíamos hablado sobre mi nombre- dije aceptando el paquete.

- Lo siento, Marina. Es... es un poco inusual para mí. 

- Apuesto a que si.

Sonreí y me dispuse a abrir el paquete en el sofá que estaba frente a la cama. Ethan cerró la puerta y se apoyó en el escritorio que estaba en la esquina.

Alpha: Moon's always rightDonde viven las historias. Descúbrelo ahora