Que grande se plasma el mundo,
Pero mi mundo no es tan grande.
Ni hay mucho aire que desbande.
Es tan grande el vacío, profundo.
Así se siente ver reflejado
En ojos sinceros la desilusión,
En ojos crisálidos la decepción.
¡Hay de mi corazón, fue fusilado!
Que duelo produce ser conciente,
Y que pesadumbre es la culpa.
Y que cruel es apagar
Una luz tan pulcra.
Un papel arrugado que no seca la tinta
Y que en su camino triste
Vaya manchando todo
Creyendo que pinta.
Y su razón .
¡Oh, sí!
Su razón... Su pensamiento.
El que ensucia el camino,
Lo va extinguiendo.
Y su deseo va muriendo.
Despiadado y dañino.
Se va perdiendo.
Él solo se sienta a mirar,
A contemplar y meditar
En su hastío,
Y en su arrogancia.
En su vacío.
A cada hora las paredes secas
Se descascaran pues
Nada las llena.
Desvanecida su piel y su voluntad,
El eco ya no suena.
Y envidia al papel que no se ha manchado.
Al papel blanco.
Sin tinta.
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¡Para los que vivimos en angustia!
PoésieHay cosas que se piensan imaginarias, pero son mas tangibles que quienes profesan tal mentira. Hay pechos muy llenos de lágrimas, y hay mentes con infinidad de nudos. Esta es una pequeña expresión del sentir de tales almas...
