A la mañana siguiente un dolor punzante en la cabeza despertó a Saga, se movió en la cama, agarrándose la frente con ambas manos mientras gruñía del dolor. Lentamente abre los ojos y se percata que el techo no le es familiar. Tarda un momento en reaccionar hasta que se sienta en la cama y se da cuenta que está completamente desnudo - ho no ...-piensa atormentado, el hombre no sabía donde se encontraban, ni lo que había hecho. Analiza un poco más la habitación y se da cuenta que le pertenece a una mujer, pero a la vez le parece que la misma no tiene nada hogareño. De todos modos, no importa eso, no había dudas de que había pasado la noche con alguien todavía no tenia idea de con quién. Da un fuerte suspiro y se dispone a vestirse, con dificultad va recogiendo sus prendas del suelo y se viste despacio, ya que el dolor le resulta realmente fuerte. Termina de vestirse reprochándose mentalmente por haber cometido semejante acto de irresponsabilidad y sale del cuarto. Al salir, se percata que esta en un hotel caro y observa una bandeja con el desayuno servido.
-Buenos días- una voz femenina interrumpe sus pensamientos
-Chris ... buenos días- respondió al encontrarse finalmente con la persona con quien había pasado la noche.
- Pensé que era mejor que te sirvieran el desayuno aquí, en vez de bajar a comer- dice con una sonrisa.
- ¿Qué hay de ti?
-Yo ya desayuné más temprano, es más, tuve tiempo de ir a la farmacia a comprarte esto- se acerca y le brinda unas aspirinas- supuse que los necesitarías- el hombre acepta avergonzado y se toma un par de inmediato.
-¿Qué hora es?
- Es casi medio día, pero recuerda que es domingo, no tienes ningún horario que cumplir hoy- el peli azul se avergüenza una vez mas y se sienta para evitar verla, no podía recordar nada de anoche pero sabía que estaba estado juntos, ni siquiera recordaba si se había protegido.
-Chris anoche ...
-No digas nada- lo interrumpe- solo come hablaremos después.
El hombre solo asiente y se dispone a comer, no estaba en posición de discutir ni ir contra la corriente. El dolor de cabeza todavía era muy fuerte por lo que aprovecharía el tiempo para que las aspirinas hagan efecto. Una vez ingerido todo el dolor de cabeza ya no era tan intenso por lo que no dilataría más el asunto.
-Creo que ya podemos hablar- dice sin rodeos
-De acuerdo, te escucho- esto incomodó al hombre la verdad es que no sabía por dónde empezar la charla.
-Chris anoche yo ... bebi mucho, no debí venir a verte en ese estado, lo siento- la mujer lo mira seria.
-Esta bien, yo me di cuenta que habías bebido, no quería dejarte ir así. Sabia que estabas con el coche y no me pareció correcto que manejaras.
- Muchas gracias por eso.
-¿Algo más?
- Chris, no está bien que sigámonos viéndonos así, no mereces esto- dice mientras se para- será mejor que no nos volvamos a ver- se dispone a irse.
- Espera Saga- le corta el paso- ya dijiste todo lo que quisiste, ahora es mi turno de hablar- la mira sorprendido, ella tenía razón, ahora era su turno de escuchar.
-De acuerdo- se sienta.
-Yo se lo que pasa aquí, se que cuando vienes, no es porque quieres verme- hace una pausa- vienes porque estas solo y frustrado y quieres descargar todo eso en mí.
-No, no es así- intenta explicarle- no es por frustración
-¿Vas un mentirme? ¿Vas a decirme que no estas frustrado?
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Esto no podrá separarnos
RomanceDespués de sufrir un grave accidente automovilístico, Seiya pierde los movimientos de sus piernas. Saori, su esposa, tendrá que ser muy paciente con la situación porque la vida ya no será la misma. Los personajes no son míos, pertenecen a M. Kuruma...