Charlotte llega a Forks dónde para su suerte encontrará a su amor eterno incluso a pesar de la enfermedad, la muerte y lo sobrenatural.
-¡Ellos son vampiros!-
-Genial Bella, estás loca-
𒊹︎︎︎Los personajes no me pertenecen Solo Charlotte y su famili...
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Pov' Omnisciente
Jasper llegó a la casa de los Chise apenas el reloj marcaba la hora acordada.
-Por un momento creí que me dejarías plantada caballero Jasper - hablo con gracia y sarcasmo Charlotte.
-Jamas me lo permitiría Lady Charlotte- le contesto el siguiendo el juego mientras abría la puerta del auto.
Para suerte de ambos el viaje hasta el restaurante fue cómodo, sin ningún silencio de por medio ya que la rubia no se callaba ni para respirar, algo que le agradaba a su acompañante puesto que el no tenía muchos temas de conversación en mente.
-Llegamos-
-Jasper, esto es un broma ¿verdad?-
Se encontraban frente a uno de los restaurantes más caros y refinados de Port Angels, conocido por su gran variedad gourmet de todas las nacionales.
-No, ¿por qué lo preguntas?- háblo el rubio haciéndose el desentendido
-No se tú, pero en mi caso no tengo para pagar ni un vaso de agua en este lugar-
-Pero yo si, por eso te invite ¿No?-
-Eso creo...-
Subieron hasta la mitad del edificio donde Jasper había reservado mesa y por un momento Charlotte se sintió fuera de lugar, todos a su alrededor vestían de fórma elegante, incluso Jasper usaba una camisa, aún así logro calmarse bastante rápido y volver a tener aquella confianza en sí misma que portaba siempre.
-¿Sucede algo?- pregunto Jasper
La chica quería que la tierra la tragara y la escupiera en Marte, más allá de que le pareció raro que el chico la llevará a tan lujoso restaurante para que el no pidiese nada ella no sabía que pedir, no conocía la gran mayoría de comidas del menú, además de que si pedía algo muy pesado o muy asido eso le pasaría una muy mala pasa debido a su enfermedad.
-No tengo idea de que pedir...- admito con cierto grado de vergüenza
-hay una pasta muy buena, no es asida ni tan pesada se llama Pasta blanca, no creo que tú estómago se dañe-
-Entonces confiaré en tu criterio Jass - le contesto la rubia hasta que se dió cuenta de algo
Charlotte en ningún momento había hablado abiertamente sobre su enfermedad con Jasper, estaba segura que ni siquiera lo había insinuando, sentía que le daba pena a la gente por lo tanto no solía hablar de eso.
